Los polémicos registros para detectar droga en las aulas de los institutos mediante la llegada por sorpresa de agentes de la Policía Local acompañados de perros cuenta con el beneplácito de la Fiscalía de Menores, que considera la medida no sólo legal, sino efectiva para prevenir el consumo de sustancias estupefacientes en los centros públicos.

Fuentes de la Fiscalía de Menores de Alicante señalaron ayer a este diario que, tal y como está planteada la inspección de los institutos, no hay ningún tipo de "problema legal" que pueda cuestionarse, siempre y cuando el acceso a los centros esté autorizado por la dirección del mismo y los cacheos a los chavales se realicen conforme a la legalidad.

En cuanto a la valoración de la eficacia que puede suponer la llegada de agentes con los perros para detectar droga, las citadas fuentes indicaron que tiene sentido y que de hecho, las inspecciones llevadas a cabo durante el primer día de clase revelaron que hay hachís y marihuana en los centros. Pero ya no sospechas, sino realidades comprobadas in situ por agentes de la Policía Local. "Como medida preventiva puede ser efectiva, aunque la efectividad se medirá con las estadísticas, y desde el punto de vista legal no supone, en principio, ningún problema", explicaron las citadas fuentes.

Respecto a las manifestaciones realizadas desde la federación provincial de padres de alumnos "Gabriel Miró", en las que destacan que se pone en entredicho la inocencia de los alumnos, además de suponer, a su juicio, una medida poco pedagógica, la Fiscalía rechaza que se trate de una vulneración de la presunción de inocencia. "Es lo mismo que cuando se coloca una cámara de seguridad o se realizan controles de alcoholemia en la carretera. Estas medidas tienen un carácter preventivo", añaden las fuentes consultadas. "Mientras haya permiso, se realicen los cacheos conforme a la ley y no exista ningún abuso ni malas prácticas por parte de los agentes, la Fiscalía no entiende que haya que investigar nada, al margen de si la medida se realiza únicamente en centros públicos, una cuestión que ya da más pie al debate", precisaron.

Aunque hasta el momento los registros en los institutos con perros antidroga se han realizado en centros públicos, fuentes municipales explicaron que se llevarán a cabo en todo tipo de institutos, siempre y cuando lo pidan sus responsables.

Falta o delito

La Fiscalía investiga si existe un delito de tráfico de drogas en menores siempre y cuando se demuestre la venta flagrante de las sustancias, o cuando la droga incautada supera cierto peso, que en el caso del hachís está delimitado a partir de los 50 gramos. Normalmente, hachís y marihuana son las principales sustancias que pueden encontrarse en los institutos y sus inmediaciones, y la mayoría de veces se detecta en pequeñas cantidades, por lo que el menor no incurre en un delito, sino en una falta penada con multa.

Por su parte, desde el Síndic de Greuges se indicó ayer a preguntas de este diario que el área del menor de esta institución autonómica sólo estudiará esta medida si llegan formalmente quejas o denuncias al respecto.

El miércoles, agentes de la Unidad Canina de la Policía Local, acompañados por perros anti-droga, realizaron los primeros rastreos. Le tocó el turno a cinco institutos públicos -Mare Nostrum, Bahía de Babel, El Pla, Leonardo Da Vinci y Virgen del Remedio- y en tres de ellos los canes detectaron droga en las inmediaciones del centro y en uno de los alumnos.

Los padres demandan al fiscal que actúe de oficio

El abogado de la formación de padres de alumnos provincial "Gabriel Miró", Javier Ferrández, se ha puesto manos a la obra para que la presencia de los perros antidroga en las aulas sea valorada por la Fiscalía como una "intromisión en el derecho a la intimidad" de los estudiantes menores de edad. Para ello, está recopilando toda la información publicada desde el pasado miércoles, en que se llevó a cabo la actuación policial en los institutos sin conocimiento previo de los padres de alumnos, -como asegura el presidente de la federación provincial mayoritaria de padres de los centros públicos, Ramón López- y se la hará llegar al fiscal "para que actúe de oficio alentado por todo lo que le presentaremos con un escrito con nuestra opinión, contraria a este tipo de campañas exhibicionistas", abunda López. Esta misma formación de padres quiere pedir responsabilidades a los directores de centros que permitieron la entrada de los perros "sin consultar previamente al consejo escolar del centro. La Policía no actuó por mandato judicial al llevar a los perros a las aulas, y dudamos de que los directores tengan la capacidad de actuar como lo han hecho desde su autoridad", concluye López. V. B.