La tendencia se ha roto. El descenso en el número de abortos registrado tras la aparición en el mercado de la píldora del día después se invirtió durante 2010, cuando las interrupciones voluntarias del embarazo aumentaron un 3,5% en la provincia de Alicante. Durante todo el año pasado se practicaron 3.849 abortos, según los datos de la Conselleria de Sanidad .

"Hay que tener en cuenta que la píldora del día siguiente vino acompañada de una enorme campaña informativa que caló entre la población más joven. Unos mensajes que se han ido diluyendo con el paso del tiempo", explica la diputada socialista Consuelo Catalá. Menos información en la calle, pero también en las escuelas. A juicio de Catalá, detrás de este aumento en el número de abortos se esconde también "la práctica desaparición, en los últimos años, de los programas de educación sexual en las escuelas".

La mayor parte de los abortos se practicaron en la ciudad de Alicante, 887, seguida de Elche, con 539 interrupciones. Llama la atención el hecho de que un tercio de las mujeres que se someten a un aborto ya han sufrido una interrupción con anterioridad. El perfil de la mujer que aborta es el de una joven de entre 20 y 29 años, soltera, que convive con su pareja y no tiene hijos. La mayoría son asalariadas, con estudios de segundo grado, y que nunca han acudido a un centro de planificación familiar a informarse sobre medidas anticonceptivas. Cabe destacar que el 95% de las interrupciones del embarazo se realizan en centros privados.