Con la vista puesta en la creación de nuevos proyectos, el conseller de Educación y Empleo, José Císcar, dejó ayer a un lado de manera momentánea las tijeras con las que la Generalitat ha confeccionado los presupuestos autonómicos de 2012 para anunciar la puesta en marcha a lo largo de la próxima legislatura de un plan destinado a respaldar la capacidad emprendedora. Un proyecto que contará con una inyección económica a largo plazo de 70 millones de euros.

Las actuaciones se desarrollarán de forma conjunta entre las consellerias de Educación e Industria y beneficiarán a cerca de 12.000 nuevos emprendedores de la Comunidad. Una apuesta firme, según el dirigente autonómico, que combina tanto la línea de "los ajustes y la austeridad", como la de aplicar "sentido común y esfuerzo" para crear soluciones.Sin dejar de lado la máxima de ofrecer una de cal y otra de arena, Císcar tuvo que dar paso al análisis de los reajustes a los que se ha sometido a las cuentas de la conselleria que coordina. Una operación que en lo relacionado con las partidas destinadas al empleo ha llevado a tener que "eliminar todas aquellas ayudas que no iban dirigidas de forma directa a crear puestos de trabajo".

El titular de Educación, quien presentó ayer en Alicante junto al conseller de Hacienda, José Manuel Vela, los presupuestos para 2012, incidió en que por contra no se ha registrado una disminución de los fondos destinados al Servicio Valenciano de Empleo (Servef), ya que las reducciones en este apartado obedecen a "la nueva estructura de la conselleria, por lo que la cantidad que en 2011 se destinó a este organismo se aplica ahora a la nueva área creada pasando en concreto de los 200 millones de 2011 a un total de 214 millones para el próximo ejercicio".

Císcar fue también rotundo en la defensa de la continuidad de las partidas asignadas a la formación que reciben tanto la patronal como los sindicatos, ayudas que "se continuarán prestando, tal y como se acordó en el Pavace, al tratarse de unos puntos esenciales", en los que se aplicará una "reducción mínima que no llegará al 3% y no en todas las partidas".

El turno de explicaciones dio el saltó al máximo responsable de Hacienda quien, de entrada replicó las acusaciones del secretario general del PSPV, Jorge Alarte, quien calificó de "temerarias e irresponsables" las cuentas de 2012. Una carga que Vela respondió calificando los presupuestos de "extraordinariamente prudentes" y "austeros con mayúsculas". El resto lo devolvió de nuevo Alarte, quien advirtió de que con estos "presupuestos habrá más paro" en concreto, "30.000 desempleados más, cierres de empresas, además de contribuir a la liquidación definitiva del sistema público educativo y sanitario valenciano", puntos por los que pedirán en el pleno de las Cortes del 21 de noviembre la devolución de los presupuestos.

Ajustes "mínimos" en industria

Sin querer entrar al análisis de las partidas concretas por departamento, Vela se limitó a precisar que los recortes aplicados en áreas como, por ejemplo, la industria -en la que las partidas han registrado una reducción del 14%-, no son "notables ni suponen ningún drama, dada la cantidad de la que se habla, 30 millones de euros". Y pidió concentrar esfuerzos en "mirar hacia aquellos programas que permitan actuar en profundidad para mejorar la situación".

De igual manera, volvió a insistir en que la Generalitat no aplicará subidas de impuestos "para no golpear a las clases medias". Vela volvió a blindar también la defensa de la bonificación aplicada al impuesto de patrimonio por tratarse de una medida "efectiva" pese a las críticas vertidas, en gran parte, por las fuerzas sindicales.