Flexibilización sí, pero a medias. El director general de Aena, Javier Marín, optó ayer por una solución intermedia para tratar de calmar los ánimos del presidente de Ryanair, Michael O´Learly, y de las dos asociaciones empresariales hoteleras de la Costa Blanca, e intentar frenar la "sangría" de vuelos provocada por la compañía irlandesa con la cancelación de 31 de las 58 rutas que mantenía operativas en El Altet desde el pasado abril.

La compañía reaccionó a media tarde a través de un comunicado de su director de comunicación, Daniel de Carvalho, que calificó de "propuesta sin sentido" la oferta de Aena y reclamó explicaciones del porqué unos vuelos pueden operarse a pie y otros no. "Ryanair no va a dar marcha atrás en sus recortes a menos que todos los vuelos estén autorizados a embarcar y desembarcar a pie, como lo venimos haciendo cada día en la mayoría de los otros aeropuertos españoles y en más de 160 europeos".

Para De Carvalho, "la propuesta carece de sentido común" y reiteró que "Aena explique por qué ha cambiado ahora de postura cuando nos permitió embarcar a pie durante 5 años".

El director general de Aena, que participó en Alicante en la primera reunión del comité creado con los empresarios y el Consell para buscar nuevas rutas para el aeropuerto, había anunciado por la mañana que a partir del miércoles, 2 de noviembre, Ryanair podrá embarcar y desembarcar a pie la mitad de sus vuelos en El Altet. Una operativa que se mantendrá, en principio, hasta mayo de 2012, cuando se revisarán las condiciones en función del previsible incremento del tráfico que se produce durante el verano.

El director general de Aena reiteró que la decisión de que Ryanair utilice las pasarelas telescópicas no es ningún capricho y se produce, exclusivamente, por razones de seguridad. Con todo, Marín insistió en que, por ejemplo, en el aeropuerto provincial serán este invierno más permisivos que en el de Málaga, siendo ambos aeródromos de un tamaño similar. y con el mismo volumen de tráfico. Así, mientras que en El Altet, Ryanair embarcará y desembarcará a pie dos de cada cuatro vuelos, en Málaga será en uno de cada tres.

Marín insistió en que Aena dará a la aerolínea irlandesa "todas las facilidades, como al resto de las compañías que operan en Alicante, pero no pondremos nunca en duda la seguridad de los pasajeros. Lo primero es la seguridad". El director apuntó, por otro lado, que respeta el modelo de operaciones de Ryanair, que "quizá es posible en los aeropuertos pequeños, y mucho más difícil en los grandes por los riesgos que entrañan para los pasajeros los aviones estacionados con los motores encendidos y otro tipo de operaciones".

Marín matizó, como ha venido haciendo la dirección de El Altet desde el inicio del conflicto por la utilización de las pasarelas telescópicas, que el descenso de las operaciones es, en la práctica, menor que el anunciado por Ryanair. Aena insiste en que se han cancelado 7 rutas en relación a la programación del invierno pasado.

Lo que sí quiso dejar claro Marín es que "si no fuera por los esfuerzos y continuo diálogo que existe con Ryanair, esta compañía no sería en este momento el principal operador en Españas".

Ryanair ha cancelado un total de 31 destinos en El Altet. Una decisión que, según la compañía, restará 2,5 millones de pasajeros. La suspensión comienza hoy con el despegue del último vuelo entre Alicante y Zaragoza.