Dos hermanas islandesas, de 80 y 82 años, fallecidas y diecinueve estudiantes de la Universidad de Alicante (UA) heridos, casi todos ellos de carácter leve, es el balance de un aparatoso accidente de tráfico que se produjo a mediodía de ayer en la carreera N-338, junto al aeropuerto de El Altet, según los datos facilitados por la Guardia Civil de Tráfico. Los heridos fueron trasladados al Hospital General de Alicante, al General y al Vinalopó de Elche y al de Torrevieja, y tres de ellos quedaron ingresados.

El siniestro se produjo en torno a las 14.30 horas en el kilómetro 1,650 de la mencionada vía cuando el autobús, en el que viajaban 43 universitarios de Guardamar, Torrevieja y La Marina (Elche) que regresaban a sus casas tras las clases, circulaba en dirección a Torrevieja y justo a su lado viajaba una furgoneta, modelo Partner, por el carril de aceleración que, por causas desconocidas, intentó realizar un giro imprudente para cambiar de sentido y se cruzó literalmente en la calzada.

En ese momento la furgoneta fue embestida por el autobús, que no tuvo tiempo más que de frenar antes de producirse el brutal impacto, según fuentes próximas a la investigación.

De hecho, la hipótesis que se baraja y que estaba siendo investigada por la Guardia Civil es que las ocupantes de la furgoneta, que fallecieron en el acto debido al virulento impacto, intentaron modificar el sentido de la conducción sin darse cuenta de que a escasos metros y en su mismo sentido viajaba el autobús.

Fuentes próximas a la investigación señalaron la posibilidad de que las mujeres se equivocaran de itinerario e intentaran cambiar su ruta, sin percatarse de la peligrosidad de la maniobra. Ayer por la tarde se barajaba la posibilidad que, aunque hubieran mirado por el retrovisor de la derecha, no hubiesen detectado la presencia del autobús en el carril izquierdo.

Mientras que la furgoneta invadía la calzada, el conductor del autobús intentó dar un volantazo para esquivar el vehículo, aunque finalmente colisionó contra el lateral del furgón y fue a caer en una zanja, que divide esta carretera con otro vial que tiene dos carriles más, donde quedó volcado sin que, afortunadamente, chocara con ningún otro vehículo.

Por su parte, los efectivos de la Guardia Civil de Tráfico -que tomaron declaración en el lugar mismo del siniestro tanto a los ocupantes del vehículo como a los testigos oculares del accidente- señalaron que se había tratado de una colisión fronto-lateral por causas desconocidas y que se estaba investigando. Instantes después del accidente los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Elche montaron un dispositivo para desviar todo el tráfico de la vía hacia la nacional 340, para evitar y solventar las retenciones y atascos.

La carretera afectada por el siniestro permaneció cerrada cuatro horas hasta que los servicios de urgencias retiraron con sendas grúas los dos vehículos siniestrados y los agentes de la Benemérita concluyeron la toma de los datos referidos al siniestro para poder aclarar las causas que provocaron la trágica colisión.

Las mujeres llevaban sus palos de golf en la parte trasera del coche

Las dos fallecidas, hermanas de 80 y 82 años, según los primeros datos, de nacionalidad islandesa quienes, al parecer, se dirigían a jugar al golf, ya que en la parte trasera de la furgoneta que conducían había bolsas con el equipamiento necesario para practicar este deporte.

Fuentes próximas a la investigación indicaron que, en principio, parece que estas dos personas podrían haber llegado a la provincia en las últimas horas y que habrían alquilado un vehículo para desplazarse, lo que explicaría la confusión y el desconocimiento de las carreteras de la zona.

El vehículo en el que viajaban las fallecidas sufrió un terrible impacto en el lateral izquierdo que deformó por completo la estructura del furgón. Por ello, fue necesaria la ayuda de los bomberos para excarcelar a la conductora y poder sacarla del coche.

Una vez que los sanitarios comprobaron que las dos mujeres habían fallecido se dio aviso al equipo de medicina legal de Alicante, hasta cuyo instituto fueron trasladados los dos cuerpos con la intención de realizarles la autopsia.