Y van cuatro. La alcaldesa de Alicante volvió ayer a repartir a los periodistas una nueva entrega de las explicaciones con las que pretender contrarrestar las acusaciones del fiscal sobre el amaño del PGOU pero en las que no explica qué buscaba el empresario Enrique Ortiz al pedirle que "pintara de azul" tres de sus parcelas.

Tras una introducción en la que vuelve a negar una vez más que favoreciera al promotor, la regidora adjunta alegaciones de Oritz al planeamiento que fueron rechazadas por el Ayuntamiento y añade que "las aspiraciones del promotor, que se materializaron en alegaciones a la propuesta de planeamiento, fueron desestimadas en todos los casos".

En el segundo párrafo del folio con que zanja este cuarto alegato de defensa dice Castedo: "En lo publicado al respecto destacan los investigadores (vuelve a entrecomillar el término) que el empresario se dirigió a mí solicitándome que pintara de azul tres parcelas de su propiedad, entendiendo policía y fiscal que eso conllevaba un cambio en la calificación de terrenos para favorecer los intereses del empresario".

Tal afirmación, no obstante, no se aclara en el texto difundido por la alcaldesa quien sólo se limita a agregar al respecto: "No me explayo en más explicaciones. Basta con las alegaciones presentadas y las contestaciones desestimatorias que se acompañan tanto de la primera exposición del Plan General como de la segunda". Y concluye con la misma coletilla con la que que ha zanjado sus tres escritos anteriores: "Lo dicho: no ha existido una firme voluntad de trabajar bien... de investigar (con comillas) en base a la verdad".