Se fueron de marcha en una noche que nunca olvidarán. Las copas, esa madrugada del 18 de marzo pasado, le salieron caras. Un juez sentará a un matrimonio en el banquillo por haber dejado en casa a su hija de cuatro años toda una noche mientras ellos salían de fiesta. Los acusados, de 33 y 35 años, se enfrentan a un año de prisión, solicitado por el fiscal por un presunto delito de abandono temporal de menor, según ha podido saber este diario a través de fuentes judiciales. Se da la circunstancia de que la madre ya estuvo detenida meses antes por dejar a su hija en el interior de un vehículo, cuando la pequeña tenía tres años de edad, para ir a tomar copas a un pub, en cuyo interior agentes de la Guardia Civil la detuvieron por un delito similar de abandono de menor tras la llamada de unos de los clientes.

Respecto a los hechos por los que el fiscal pide un año de cárcel para el matrimonio ocurrieron concretamente el 18 de marzo de este año, cuando una vecina avisó a la policía de que la niña de su vecinos estaba en el balcón, llorando y que la oía sollozar. Hasta el lugar de los hechos -una vivienda del barrio alicantino de San Blas- se desplazaron varias dotaciones del Cuerpo Nacional de Policía. Según los hechos probados por el fiscal en su calificación, a la que ha tenido acceso este diario, los agentes intentaron localizar a los padres, y al darse cuenta de que la pequeña estaba sola en casa, intentaron entrar, pero no lo consiguieron al econtrarse la puerta blindada cerrada con llave. Por este motivo se requirió la presencia de los bomberos, que mediante un canasto y a través del balcón pudieron evacuar a la menor.

Sobre las 8 horas, según la calificación del fiscal, se personó en el domicilio la madre de la niña, ahora acusada, "con síntomas de embriaguez". A los minutos llegó el marido, también aparentemente ebrio. Los agentes procedieron a su detención como presuntos autores de un delito de abandono de menor. El juez ya ha abierto juicio oral por este asunto, una vista para la que aún está por concretar una fecha a principios de 2012. Tanto los policías que intervinieron en la evacuación de la niña como la vecina que dio el aviso al 091 han sido requeridos para declarar en el juicio. Según consta en la calificación judicial sobre los hechos ocurridos, la menor fue entregada a su abuela paterna el día en el que el matrimonio fue detenido. Servicios Sociales abrió un expediente de seguimiento sobre la situación de la niña para su control y detección de un posible desamparo.

El martes, un vecino de San Vicente que fue detenido por haber dejado a su hijo de tres años solo en casa, quedó en libertad con cargos por un presunto delito de abandono temporal. El hombre, de 27 años de edad, dejó al niño en su vivienda mientras fue a la Biblioteca Municipal a tomar prestados unos vídeos y libros. El pequeño salió al balcón llorando y una vecina avisó a los servicios de emergencias. Los Bomberos rescataron al pequeño por la terraza y el padre fue detenido por la Guardia Civil.