El juez en funciones de guardia decretó ayer ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza para dos jóvenes, un español y un rumano de 22 y 24 años respectivamente, que fueron detenidos el martes por una presunta agresión sexual a una joven de 19 años con una minusvalía psíquica. Los agentes llegaron a arrestar a tres de los cinco chavales que, según la denunciante, practicaron los abusos, si bien el magistrado dejó en libertad a uno de los detenidos al coincidir todas las versiones en que no pudo mantener relaciones sexuales por el exceso de drogas que soportaba su cuerpo.

La Policía busca ahora a los otros dos jóvenes que, presuntamente, participaron en los hechos, ambos de nacionalidad rumana y que según fuentes judiciales ya están identificados.

La presunta agresión se produjo el lunes por la noche, cuando los arrestados se fueron con la denunciante a una vivienda abandonada de Alicante, propiedad de un familiar de uno de los detenidos, donde estuvieron bebiendo alcohol y consumiendo drogas antes de mantener relaciones sexuales que, según los detenidos, fueron siempre consentidas. Posteriormente, se unieron dos jóvenes rumanos más. Fuentes judiciales explicaron que tanto la denunciante como uno de los detenidos que ayer ingresó en prisión padecen una minusvalía psíquica.

El juez dejó en libertad a uno de los arrestados tras coincidir todas las versiones en que no pudo llegar a mantener relaciones sexuales por la carga de alcohol y drogas, mientras que ordenó el ingreso en prisión provisional de los otros dos por su presunta participación en un delito de agresión sexual. Fuentes judiciales explicaron que, según el informe médico realizado a la joven, no se puede extraer que hubiese agresión, pero que el informe forense no es vinculante. Asimismo, se está a la espera de las pruebas del ADN, aunque el detenido que quedó en libertad asegura que, al menos uno de ellos, sí que tuvo sexo con la chica, pero siempre de forma consentida.

Según este joven, A.F., dos de los detenidos entablaron conversación en un parque de la zona norte con la chica sobre la posibilidad de hacer un trío, por lo que se fueron con ella a una vivienda. Una vez allí también se sumaron otros tres jóvenes, de nacionalidad rumana, que se fueron a otra casa ubicada en un piso superior, según sus declaraciones a este diario. Indicó que cuando volvió a ver a la denunciante sí la notó "rara" y que le dio dinero para un taxi. Afirmó que habían tomado hachís y cocaína. Todas las versiones coinciden en que la joven se había escapado de casa.

Familiares

Familiares de uno de los jóvenes para los que el juez dictó prisión provisional protagonizaron ayer momentos de tensión en el juzgado de guardia al saber que su familiar iba a la cárcel de modo preventivo. La madre llegó a desmayarse en el suelo. "Mi hijo no está bien, no puede hacer eso, pongo la mano en el fuego", señaló, y lanzó amenazas contra la denunciante mientras estaba en el suelo del juzgado de guardia.