El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, presidió ayer la constitución en Bruselas de un frente común con los empresarios y presidentes de los tres puertos de la Comunidad para exigir a la UE que financie y declare prioritaria la construcción de un corredor ferroviario de mercancías que conecte Algeciras y Francia por Alicante.

Camps estampó su firma junto a la de los representantes de la patronal en el documento "Unidos por el Corredor Mediterráneo", que será entregado a la Presidencia de la Comisión Europea y que servirá como elemento de trabajo para la defensa del proyecto del Gobierno que incluye a Alicante y Murcia, pero que, hasta ayer, sigue sin convencer a Bruselas, que se inclina porque la carga salga por Madrid. Camps apeló a la unidad de todas las administraciones, sea cual sea su color político, para reclamar financiación a la UE y se mostró confiado en lograrlo.

"Hubo un tiempo en que Bruselas miraba para otro lado cuando el Gobierno pidió fondos para el trasvase del Ebro. Al final la constancia hizo que nos concedieran 1.200 millones de euros, que luego el Gobierno de Zapatero dejó perder al retirar el proyecto. Pero entonces se demostró que con unión todo es posible", sentenció el jefe del Consell durante la firma del documento y en su intervención en un seminario sobre la Alta Velocidad organizado por el Comité de Regiones de la UE.

Camps calificó el corredor como "un eje estratégico de comunicaciones por su gran potencial, tanto en el traslado de viajeros como de mercancías, y su importancia económica y social, no solo para las regiones litorales españolas por las que discurre, sino también para el conjunto de España y para la UE".

El jefe del Consell recordó que el Corredor Mediterráneo supone atender las necesidades de más de 30 millones de habitantes de las regiones europeas afectadas en la costa española y el sur de Francia, así como de un sistema productivo que genera 714.000 millones de euros. En su área se ubican los puertos más importantes que, conjuntamente, representan más del 80% del tráfico de contenedores de la Europa.

Camps valoró, por otro lado, las ventajas del ferrocarril para el transporte de mercancías por su menor impacto en el territorio y el medio ambiente y su "mayor capacidad para poder comunicar cualquier rincón de Europa y transportar sus productos con todas las garantías".

Desde Alicante, la alcaldesa Sonia Castedo volvió a pedir el apoyo "sin fisuras" al Gobierno central en su defensa del corredor ante la Presidencia de la UE y se mostró convencida de que el ministro Blanco no fallará.

Competitividad

Por su parte, el Consell Econòmic i Social (CES) de la Comunidad afirmó ayer en un comunicado que la mejora de las infraestructuras es clave para mejorar la competitividad. El presidente del CES, Rafael Cerdá, señaló, en este sentido, como reto para 2011 la mejora de las infraestructuras y aludió a la urgencia de "asegurar el Corredor Mediterráneo de mercancías, la llegada del AVE a las tres provincias y la necesaria conexión de la Alta Velocidad entre Castellón y Tarragona".

delegaciónSólo Campoy y Cerdán por la provincia

El presidente de la Generalitat encabezó en Bruselas una delegación empresarial en la que se echó en falta más participación de agentes de la provincia de Alicante, de la autodenominada sociedad civil que la semana pasada acudió en bloque a la llamada de Coepa. Junto a Camps, firmaron la declaración "Unidos por el Corredor Mediterráneo", el presidente del Puerto, Miguel Campoy; el presidente de la Cámara de Comercio de Orihuela, Félix M. Cerdán; el presidente de las Cámaras de Comercio de la Comunidad Valenciana, José Vicente Morata; José Vicente González, por Cierval; Federico Félix, de la Fundación Pro-Ave; Rafael Aznar y Juan José Monzonis, de los puertos de Valencia y Castellón; Juan Cámara, vicepresidente del "lobby" Ferrmed; Diego Lorente, director general del AVE; e Isabel Bonig, consellera de Infraestructuras, que viajó tras reunirse con el ministro Blanco. F. J. B.