Renfe anunció ayer que a partir del 1 de julio suspenderá la línea del AVE que cubre Madrid y Albacete porque ha resultado un auténtico fracaso, ya que los pasajeros castellano-manchegos optan por los precios más económicos de los Alvia que suben desde Alicante. Renfe suspenderá los tres trayectos directos de AVE que comunican Toledo, Cuenca y Albacete a los seis meses de haber puesto en marcha el corredor.

El director general del área de viajeros de Renfe, Enrique Urkijo, anunció ayer en Toledo que el balance de los seis meses de servicio directo entre las tres ciudades castellano-manchegas es "un desastre" al contar sólo con 9 viajeros al día de los 2.190 potenciales en ambos sentidos.

Los viajes directos que se suspenden serán sustituidos por billetes combinados con los que los viajeros podrán enlazar trenes Avant con AVE, Alvia o Altaria haciendo transbordo en Madrid. Urkijo aseguró que los transbordos no deben ser un "inconveniente" puesto que resultarán "más económicos" y el viaje se realizará en un "tiempo similar".

El trayecto actual entre Toledo y Albacete se realiza en 2 horas y 5 minutos con un coste de 70 euros. A partir de ahora se realizará en 2 horas y 28 minutos por 60 euros (AVE), en 2 horas y 31 minutos por 52 euros (Alvia) y 3 horas y 33 minutos por 37 euros (Altaria).

La puesta en servicio del AVE entre Madrid y Albacete (Fomento adelantó dos años la llegada de la Alta Velocidad a la capital castellano-manchega) con tres servicios diarios supuso también un recorte del tiempo de viaje de los trenes Alicante-Madrid, con billetes más baratos. Ocho euros menos en turista y treinta en preferente.