La Entradas de Bandas inundó ayer de ritmos festeros el centro de Alicante en el primer desfile de Hogueras. El acto, que arrancó con exquisita puntualidad y fue acumulando un leve retraso con el paso de las comisiones, congregó a miles de personas a lo largo del recorrido oficial, entre festeros, músicos y espectadores.

La última mascletà, que cerró ayer el ciclo nocturno, modificó la configuración inicial del desfile. Las comisiones se vieron obligadas a formar en la calle Álvarez Sereix, debido a que la plaza de los Luceros se encontraba acordonada por seguridad, al estar ya dispuestas las cargas de pólvora.

Como ya es tradición, el público se congregó en mayor medida al inicio de Alfonso El Sabio y en el último tramo de la Rambla, donde se ubicaron las Belleas del Foc y sus cortes de honor. La alcaldesa, Sonia Castedo, descartó el palco y desfiló con su hoguera.

La mayoría de las comisiones,

pese a la feroz crisis económica y tras el fuerte recorte de subvenciones de este año, abogaron por mantener el presupuesto de las bandas de música, pieza básica en uno de los desfile más emblemáticos de las fiestas de San Juan.

Setenta músicos acompañaron ayer a la comisión de Hernán Cortés, que ha preferido suprimir otras actividades y desfilar por las calles de Alicante acompañada por una nutrida banda de música. Distritos como el de Baver Els Antígons desfilaron acompañados por una colla de 40 músicos, entre dolçainers i tabaleters, mientras que otras hogueras, como Florida Plaza-La Viña, tampoco optaron por recortar gastos reduciendo el número de músicos o la comisión de La Cerámica, que con la Sociedad Musical "La Paz" de San Joan salieron al desfile oficial con el propósito de repetir el primer premio que ya han copado hasta en tres ocasiones.

Las comisiones más pequeñas también realizaron grandes sacrificios para poder lucirse en el primer gran desfile de Hogueras. Entre ellas, Barrio José Antonio, que para este año presentaron una banda "como Dios Manda", según indicó el presidente del distrito, José Miguel Gálvez.