Cientos de indignados se manifestaron ayer ante las Cortes Valencianas para protestar contra los casos de corrupción acontecidos en la Comunidad Valenciana y para que personas imputadas por delitos de este tipo no sean diputados en el Parlamento, como ocurre en la actualidad. Los hechos acontecidos el miércoles ante la Cámara de Cataluña, con decenas de detenidos por los ataques e insultos a los políticos, obligaron a los representantes del 15-M a ser más escrupulosos que nunca y a pregonar contra la violencia, lo que favoreció que hubiera una mañana tranquila y respetuosa en la que no se produjeron incidentes. La única refriega entre el fuerte dispositivo policial y los manifestantes fue tras la toma por parte de los segundos de la Bolsa de Valencia, sobre las 13 horas.

Así, unos 150 indignados entraron en la institución bursátil ubicada en la calle Libreros al grito de "les nostres vides no son un negoci" y "nacionalización de la banca". Los manifestantes realizaron cánticos contra el sistema financiero y, excepto algunos descontrolados, mantuvieron una actitud pacífica durante su protesta. Sólo un joven descolgó una cámara de seguridad del edificio lo que le sirvió las críticas y las protestas de quienes le acompañaban.

A la media hora de haber tomado la Bolsa de Valencia, primera institución de este tipo en España en sufrir la ira de los indignados, llegaron hasta cinco de los furgones de la policía nacional destinados en las Cortes Valencianas. Unos 15 antidisturbios entraron en el vestíbulo del Palacio de los Boil de Arenós para desalojar a los manifestantes, justo antes de la lectura de un manifiesto.

La policía obligó a los indignados, que se resistieron pacíficamente, a salir del edificio aunque una joven acabó en el médico con un esguince en el tobillo debido a los empujones. Una vez desalojado el edificio, sobre las 14 horas, los antidisturbios se situaron a la salida de las calles anexas al Palacio de los Boil para identificar a algunos de los manifestantes. La toma de la entidad bursátil acabó sin más incidentes tras la vuelta de los indignados a las Cortes.

Por su parte, en el cerco a la Cámara, los indignados presentaron un manifiesto en el que exigen un cambio de la Ley Electoral y la eliminación de la barrera del 5 % para tener representación en las Cortes Valencianas. También la inhabilitación permanente del político condenado por delitos contra la administración. Pese a los constantes cánticos de los manifestantes, pocos diputados sufrieron las críticas porque acudieron a primera hora de la mañana cuando todavía no había indignados.