El coordinador de Economía del Grupo Parlamentario Popular en Les Corts, Ricardo Costa, ha negado este sábado que el constructor alicantino Enrique Ortiz le haya realizado "cualquier tipo de pago o trato a su favor" y ha desmentido su participación "directa o indirecta" en la trama Brugal.

Costa se ha manifestado en estos términos en un comunicado tras conocerse que el Ministerio Fiscal cree que el empresario Enrique Ortiz pudo realizar un pago a favor del que fuera secretario general del Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV) hasta octubre de 2009, Ricardo Costa, además de encargar trabajos al socio de éste, Emilio Álvarez, abogado, con el que quería trabajar "por huevos".

El sumario de la pieza desgajada del caso 'Brugal', que investiga presuntas irregularidades en la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alicante, incluye un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) en el que la Policía recoge conversaciones de Ortiz en las que solicita al hermano de su mujer, Miguel Carratalá, que le de al socio de Costa "trabajos que tengáis ya, y empezar a trabajar".

El informe policial recoge también una conversación entre el padre de Ricardo Costa, Juan Costa, y Ortiz, en la que éste le solicita el pago de una factura pendiente para "poder presentar el segundo trimestre de IVA".

Tras hacerse públicas estas informaciones, Ricardo Costa se ha desvinculado de las investigaciones de la causa y ha recordado que él no tiene ni ha tenido nunca "ninguna responsabilidad de gestión publica ni en Alicante, ni en la Comunitat Valenciana, ni capacidad de decision en asuntos publicos".

Asimismo, se ha preguntado "cómo es posible confundir la reclamación del pago de una factura por la prestación de servicios profesionales perfectamente definidos y justificados por parte de los responsables de un despacho, con un pago de favor hacia su persona".

El dirigente 'popular' ha insistido en que sus cuentas personales "son transparentes" y que las pone a disposición de quien las solicite, al tiempo que ha pedido respeto para los profesionales, familiares y para su propia persona.