El presidente de Cruz Roja en la provincia de Alicante, Emilio Bascuñana, ha dicho hoy que "todavía" no sabe "oficialmente" si el ayuntamiento de la ciudad adjudicará a la entidad el servicio de salvamento en las playas del municipio.
Bascuñana ha hecho esas declaraciones a los periodistas al ser preguntado sobre si el consistorio les iba a adjudicar las tareas de protección en las playas de la capital, tras firmar un convenio con el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, para atender a personas en situación de exclusión social.
Ha admitido que es un aspecto que aún no sabe "oficialmente", a lo que ha añadido que "rumores hay muchos".
En este sentido, ha explicado que se han presentado muchas empresas como candidatas a obtener la adjudicación municipal de las playas de la ciudad, aunque ha precisado que, "institucionalmente, todavía no ha salido nada" y no ha habido un pronunciamiento, lo que espera que se produzca entre mañana y el próximo lunes.
A nivel de la provincia, Bascuñana ha subrayado que Cruz Roja prestará servicios, en caso de que se firmen todos los acuerdos necesarios, en las playas de Torrevieja, Orihuela, Guardamar del Segura, Santa Pola, Xàbia y Dénia, entre otras.
"En todas esas localidades vamos a continuar prestando los servicios si no hay ningún cambio de última hora", ha apostillado.
Preguntado sobre si había alguna zona costera en la que tenían previsto dejar de prestar servicios con respecto a años anteriores, se ha referido a la ciudad de Alicante, en caso de que no se les concediera dicho servicio.
Acerca de las 55 banderas azules otorgadas este año a las playas de la provincia, ha señalado que "uno de los atractivos de Alicante es el sol y la playa" por lo que ha estimado necesario que las zonas costeras alicantinas "estén en condiciones".
"Hay que trabajar por mantener las playas e, incluso, por mejorarlas", ha agregado.
Para Bascuñana, "las playas alicantinas están por encima de los servicios de otras playas españolas y de otros países", donde "se cuidan menos".
A este respecto, Ripoll ha aludido a la situación actual de los 'chiringuitos', afectados por la Ley de Costas, una política que ha calificado de "equivocada".
Ha opinado que, en lugar de proponer la "eliminación" de esos negocios, se tendría que haber optado por la "modernización de sus instalaciones", al entender que son "unos establecimientos muy solicitados por los bañistas".
Por su parte, Bascuñana ha destacado la "seriedad" y "el mayor de los rigores" con los que, a su juicio, presta Cruz Roja sus servicios en las playas de la provincia.
También ha hecho un llamamiento a la "unificación" de las metodologías de trabajo en las zonas costeras para "regular los servicios" y "evitar" la diversidad "tan amplía" de recursos, los cuales, a su parecer, son "muy limitados".
