La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, dejará de cobrar su sueldo en el Ayuntamiento y sólo percibirá el de las Cortes como diputada autonómica. Como ella misma recordó ayer, cobrar los dos sueldos es incompatible por ley, por lo que ha optado por quedarse con el de diputada y renunciar al que cobra en el Ayuntamiento para que, según dijo, las arcas municipales "no tengan que soportar esa carga".

Se trata de un primer gesto que deja ver que las intenciones de Castedo de cara al nuevo mandato se encaminarán a hacer ajustes económicos en el Consistorio. Si bien ya ha confirmado que reducirá el personal de confianza, nada ha dicho de cómo quedarán los sueldos de los concejales. Esto último, según dijo ayer, lo desvelará cuando tome posesión la nueva corporación.

El sueldo de la alcaldesa está fijado en 72.000 euros, si bien dentro de los recortes llevados a cabo en junio de 2010 el pleno decidió bajarlo un 10%. El salario es más alto que el de las Cortes, donde como diputada rasa -sin pertenecer a ninguna comisión o ser portavoz de ellas- puede cobrar al mes unos 4.000 euros, según fuentes de las Cortes, que explican que al año serían 56.000 euros porque son 14 pagas. Además de ese salario, Castedo podrá cobrar por su asistencia a los plenos y por su presencia en los consejos de administración de los que forme parte como alcaldesa.

Castedo anunció ayer esta decisión, pero evitó pronunciarse sobre la petición que ha realizado públicamente Esquerra Unida de reducir los cargos de confianza y los sueldos de los concejales en más de un 15% para que se asemejen al de un trabajador medio.

"De todas esas cuestiones hablaré cuando tome posesión y entre la nueva corporación", señaló la alcaldesa, quien incidió en que no será hasta entonces cuando comunique la nueva organización y los cambios dentro del Ayuntamiento.

Pese al hermetismo de la primera edil, que asegura no tener decidida la asignación de funciones a los 17 concejales con los que cuenta, cada vez son más las voces dentro del Ayuntamiento que apuntan a que sus principales bastiones serán el actual edil de Atención Urbana, Andrés Llorens, y la edil de Turismo y Fiestas, Marta García Romeu.

La condición de diputada autonómica obligará a Castedo a viajar con asiduidad a Valencia para asistir a las sesiones de las Cortes y el nombre de Andrés Llorens es uno de los que más suena para ocupar sus funciones cuando ella se ausente, algo que no sería nuevo para él porque durante este último mandato ya ha ocupado el puesto de primer teniente de alcalde.

Los ediles que conformarán el nuevo equipo de gobierno local a partir del próximo 11 de junio confirman que, por el momento, la alcaldesa no les ha comunicado su destino, mientras Castedo sostiene que todavía no tiene cerradas sus decisiones.

Pese a ello, diversas fuentes municipales apuntan a que García Romeu tiene bastantes papeletas para ocuparse de Urbanismo, área para la que algunos se decantan por Llorens. En Hacienda, las apuestas se dirigen a García Romeu y Juan Seva, aunque hay quien no descarta la entrada de alguna cara nueva.

La alcaldesa evita dar su apoyo a Ripoll

La alcaldesa, Sonia Castedo, volvió a eludir ayer pronunciarse sobre si apoyará o no al número dos de la lista municipal, José Joaquín Ripoll, para que permanezca al frente de la Diputación Provincial los próximos cuatro años. "Es una cuestión de partido", señaló ayer la primera edil tras ser preguntada sobre a quién apoyará para presidir esta institución. "

No tengo ni idea", dijo Castedo, quien incidió en que "eso es una cuestión de partido y yo siempre hago lo que dice el partido". En esta línea, la alcaldesa subrayó que "pertenecemos a un partido que nos marca el camino a seguir". De esta forma salió al paso eludiendo, una vez más, dar su apoyo a Ripoll, con quien mantiene una tensa relación.