La red desarticulada hace una semana en Murcia, Alicante y Elche por dedicarse a realizar matrimonios de conveniencia para regularizar a inmigrantes nigerianos cobraba entre 10.000 y 12.000 euros por los trámites de cada boda, según informó ayer la Policía. Como ya informó este diario hace una semana, la Policía Nacional detuvo a 14 personas en la operación, seis en Murcia y ocho en Alicante y Elche.

Las investigaciones policiales se iniciaron a principios de este año tras detectar anomalías en varias solicitudes de regularización como ciudadanos comunitarios presentadas por inmigrantes de origen nigeriano que habían contraído matrimonio con españoles. Así, fijaban un domicilio común que era ficticio y en las bodas intervenían personas que en unos enlaces figuraban como testigos y en otros como contrayentes.

De los 12.000 euros que cobraban los presuntos responsables de la trama, entre 1.000 y 2.500 euros se pagaban a los españoles que se prestaban para figurar como contrayentes, según la información policial.