¿Cómo valora la campaña de su partido?

Yo creo que la campaña electoral está siendo un momento de reflexión importante y de movilización. El otro día, en la plaza de toros de Valencia, hicimos una gran demostración de la capacidad de movilizarnos en torno al proyecto de dignidad y honradez que los socialistas valencianos estamos proponiendo. Estamos satisfechos. Ahora hay que esperar hasta el domingo para que los ciudadanos y las ciudadanas se pronuncien libremente en las urnas.

¿Y la del PP?

Su campaña ha sido la no-campaña, ha sido esconder a Camps e intentar que los ciudadanos y ciudadanas no se sentaran en casa a reflexionar sobre el futuro de nuestra Comunidad, sobre lo que ha pasado en estos cuatro años y, ante todo, sobre qué decisión de futuro van a tomar este domingo. Yo digo una cosa que explica bien la campaña del señor Camps: que la gente le mire la cara de su valla.

Ha irrumpido en campaña un acontecimiento nuevo, el que se ha venido a llamar "Democracia real ya", o "Movimiento 15-M". ¿Cómo lo valora?

Considero que es una expresión de ciudadanía, y toda expresión de ciudadanía, de petición de democracia, de libertad, de cambiar de rumbo, de dignidad, siempre es buena. Yo deseo que lo hagan a diario, y más aquí, en la Comunidad Valenciana, donde esa necesidad de cambio de rumbo y de dignidad es más importante que en ninguna otra tierra de España, así que bienvenida sea toda expresión de necesidad de cambio y transformación.

¿Aunque no pidan el voto para ninguno de los dos grandes partidos?

Aunque no pidan el voto para el PSOE. Nos ha costado mucho conseguir el derecho a decidir colectivamente nuestro futuro como para que nadie lo deje de ejercer. Yo le pido el voto al Movimiento 15-M en favor del socialismo valenciano y en favor de la dignidad.

¿Por qué, si nos basamos en las encuestas, no pasa factura la corrupción a Camps?

Yo de las encuestas me fío poco. Soy un demócrata muy clásico para estas cosas. Cómo vamos a vivir los ciudadanos y las ciudadanas de la Comunidad la próxima década es algo que vamos a decidir en la urnas, no en ninguna encuesta. Los ciudadanos y las ciudadanas evidentemente entienden que algún ciudadano concreto pueda no respetar las normas o no ser todo lo decente que toca, como es el caso, pero lo que no perdonan es la impunidad. Tolerancia cero, impunidad cero ante la corrupción, y esto es lo que, da igual el tiempo y el momento, acabará siendo objeto de responsabilidad política por parte del señor Camps, y porque además los ciudadanos saben que la política de Camps nos está costando muy cara.

¿Cómo piensa enjugar la deuda del Consell?

Lo explicaba Ángel Luna hace poco: todos los valencianos trabajando, con sus nóminas durante un año, y no sería posible todavía hacerle frente. Camps está suponiendo para nosotros, además de corrupción, también la peor de las situaciones económicas y el peor drama para muchas empresas que cierran porque no les paga la Generalitat. Por eso nosotros hacemos una apuesta por el saneamiento, por un gobierno de la Generalitat que pague sus facturas, por acabar con tanta fiesta y con tanto despilfarro y exceso. Mire, ninguna familia dejaría de pagar la factura de la farmacia, o dejaría de pagar los libros de sus hijos, y organizaría dos fiestas el sábado por la noche. Esto es lo que ha hecho Camps.

¿Y qué hará usted?

Hay que poner freno a la política del exceso que se ha vivido estos años y hay que darle la vuelta. Mire, la política del pasado es Camps, la política del pasado era gastar cuanto más mejor y nosotros queremos gastar los euros necesarios, de manera eficiente y en el bienestar de los ciudadanos y las ciudadanas. no en el despilfarro y el exceso, así que por eso limitaré por ley el endeudamiento del Consell para gastar en lo necesario, en lo importante, que son los ciudadanos y el empleo.

¿Se considera ninguneado por Camps en esta campaña?

Nosotros estamos centrados en lo importante, que es dirigirnos a los ciudadanos y las ciudadanas y explicarles las opciones, porque el 23 de mayo será muy distinto dependiendo de a quién se vote. El 23 de mayo nos levantaremos y si hemos obtenido la confianza de los ciudadanos será un nuevo tiempo, un nuevo tiempo de derechos, de dignidad y de honradez. Camps no explica su programa, pero lo tiene, se escuda detrás de Rajoy y en echar la culpa a cualquiera, el victimismo de siempre, pero tiene un programa, que es el que no quiero para el futuro de los valencianos y las valencianas, porque es despedir maestros, despedir funcionarios, hacer que los colegios sean negocios y no un derecho para los ciudadanos, su decisión es que tengamos menos médicos, que las universidades tengan menos recursos, que lo público vaya a menos y que los ciudadanos no tengan derecho a la ley de la dependencia. Ése es su programa; no lo cuenta, evidentemente no lo cuenta, pero ésta es la elección de verdad.

Aunque ya sé que es un escenario que usted no contempla, vamos a suponer que las encuestas van bien encaminadas y que se produce una derrota que cabría calificar de histórica el domingo por parte de los socialistas valencianos. ¿Cuál será su postura?

Bueno, yo no voy a perder ni un centímetro de energía ni un segundo de tiempo en nada que no sea sumar votos para la dignidad y la honradez. Esa hipótesis no la contemplo.

Le pido que la contemple.

Usted cumple su tarea periodística y yo la mía; y la mía, que no es periodística sino política, es llamar a los ciudadanos y las ciudadanas a que nadie se quede en casa, que nos voten, que voten los jóvenes, que voten los desencantados con el Partido Popular a los que tampoco les gusta lo que ven, que todos los progresistas voten a una opción con posibilidades reales de hacer que las cosas cambien, que nadie se quede en casa, no por nosotros, sino por todos los ciudadanos y las ciudadanas, por que el 23 de mayo no sean menos maestros, menos médicos y menos oportunidades, sino más oportunidades, más formación y más derechos.

¿Por qué confían en el voto oculto? ¿De qué se oculta el voto?

Los niveles de libertad en esta tierra no son los homologables en una democracia. El pasado sábado en la plaza de toros de Valencia, los ciudadanos coreaban "libertad, libertad de expresión". Treinta años después de la Constitución española, todavía se tiene que hablar de libertad de expresión. A nadie le gusta el Canal 9 que hoy tenemos, falta libertad y falta pluralismo, y solucionar esto también es parte de nuestro proyecto. Y eso explica muchas cosas.

¿Qué haría con la CAM?

Ser responsables, ser serios y apoyar a la Caja. Quienes han llevado a la Caja a su actual situación son el señor Camps y el fracaso de sus políticas económicas. Así que, seguir apoyando a la CAM, lo que siempre hemos hecho.

¿Entonces la ve viable en solitario?

Hay que confiar en las decisiones que se vayan tomando para que sea viable y sobre todo hay que generar confianza para la seguridad del dinero de los impositores y de cuantos tenemos allí nuestras cuentas y nuestras hipotecas. Yo incluido.

¿Y respecto a Ciudad de la Luz?

Esto es parte del proyecto fracasado de Camps. Creo que es por aquí por donde hay que ajustar y recortar las políticas de gasto para gastar en lo importante, en salir de la crisis, en competitividad, en formar jóvenes competitivos, en dar oportunidades a los jóvenes que están en el paro. Toda esta política del exceso y del despilfarro es la que sobra. Aquí se llama así, y en Castellón se llama Mundoilusión, y Ciudad de las LenguasÉ hay hasta cien ensoñaciones de este tipo del señor Camps que solo sirven para que tengamos más paro y más deuda.

En tal caso, ¿qué haría con esa "ensoñación" de Camps llamada Ciudad de la Luz?

Nuestra propuesta es que se auditen todas y cada una de las "ciudades no se sabe para qué" para que veamos cuáles son viables y cuáles tienen futuro o no. Tendríamos que saber a fondo cuál es su realidad económica y financiera y si es viable y sostenible o no. Y esto, con el señor Camps, que no sabe más que contar mentiras, es muy complicado hasta que gobernemos a partir del 22-M.

¿Y el Centro de Congresos?

Es una necesidad importante, creo que hay que volcarse con Alicante. Mire, yo soy de Alaquàs, como usted sabe, y creo que Alicante necesita un gobierno valenciano más volcado con esta provincia. El señor Camps desprecia Alicante y creo que la señora Castedo sólo está preocupada por sí misma y no por los alicantinos, así que, en este terreno, secundar las propuestas de Elena Martín [candidata del PSOE a la alcaldía de Alicante], que será una gran alcaldesa de Alicante, que tiene todo mi apoyo y todo el compromiso del socialismo valenciano con ella, y por supuesto todo mi afecto y mi cariño, claro.

Una promesa electoral para la provincia de Alicante.

Turismo, turismo y turismo. Capital turística del Mediterráneo. Ése es mi compromiso. Todo nuestro esfuerzo, todos los recursos para modernizar un sector turístico que tiene que ser desde Alicante el motor para toda la Comunidad Valenciana. Acabamos de abrir una ampliación importantísima del aeropuerto de Alicante, que son nuevas oportunidades para el sector turístico; no tenemos que competir sólo en el número de visitantes, sino en que gasten más dinero, sean de más calidad, tenemos que diversificarlo, modernizarlo, crear marcas potentes, tenemos que mejorar nuestra presencia en Fitur, tenemos que ser capaces de buscar nuevos destinos, sabemos hacerlo, sabemos hacerlo bien, tenemos las mejores condiciones, la mejor geografía, pero falta un impulso de modernización junto con el sector. Así que si tengo que elegir un gran compromiso con Alicante es la de "Alicante, capital turística del Mediterráneo".

¿Alicante ciudad o la provincia, que no me queda claro?

Hablo de la provincia en general, y desde luego la ciudad está a punto de abrir un abanico de oportunidades increíble con la llegada del Ave, que es inminente y la historia de un compromiso cumplido, y por tanto ésos son mis compromisos. Y ayudar a Elena a que Alicante sea una ciudad accesible. Me gusta cómo explica la Alicante que quiere para el futuro. Y la recuperación industrial para el conjunto de la provincia también es muy importante. Turismo y reindustrialización. Éstas son las claves del futuro.