Ha estado estos últimos cuatro años en la mayoría de movilizaciones convocadas por los vecinos de Alicante. El candidato por Esquerra Unida (EU) a la Alcaldía de Alicante, Miguel Ángel Pavón, confía en que su partido logre un grupo municipal con más de dos concejales en las próximas elecciones y protagonice un cambio a "un Partido Popular que ha gobernado al servicio de intereses privados y un PSOE que ha hecho una oposición pobrísima".

¿Son estás elecciones las que mejor sitúan a su partido?

Creemos que podemos ser decisivos para cambiar la orientación política del Ayuntamiento de Alicante. No descartamos que Castedo pierda la mayoría absoluta. La única forma de que eso pase es consiguiendo el mejor resultado posible. Según los últimos sondeos de los que disponemos, obtendríamos dos concejales y creemos que incluso podríamos llegar a sacar tres.

¿Qué encuentra el ciudadano en EU que no ofrecen los dos grandes partidos?

Esquerra Unida es la única formación política que ha plantado cara a la salida antisocial de la crisis. Frente al PP, inmerso en casos de presunta corrupción, que afectan especialmente al Ayuntamiento de Alicante. Nosotros hemos sido la única formación que se ha personado como acusación popular. Los ciudadanos ven que, pese a no tener representación, nos estamos batiendo el cobre por asuntos municipales que afectan a muchos vecinos en distintas zonas de la ciudad.

¿Qué propone EU ante los mayores problemas de la ciudad, como el empleo?

Proponemos un plan de choque contra el desempleo, creando puestos de trabajo en distintos sectores a partir de la transformación del modelo económico hacia un modelo productivo. Así, queremos mantener el poco tejido industrial que nos queda -Alcoa por ejemplo- y atraer nuevos sectores a través de un polígono industrial dedicado al fomento de las energías renovables, que no se han promovido. Por otra lado, potenciar el empleo ligado a la Ley de Dependencia que el PP boicotea constantemente. Y, finalmente, para el sector de la construcción, creemos que hay alternativas, por ejemplo la rehabilitación urbana de nuestros barrios y partidas rurales, por ejemplo, mediante la instalación de ascensores en los edificios.

¿Y respecto a la Educación?

Creemos en una educación pública gestionada públicamente. Queremos ampliar los distritos, que haya una escuela infantil de 0-3 años en cada zona de la ciudad. Hoy sólo tenemos tres. Además debemos crear una Escuela de Personas Adultas en el centro, que no hay. Debemos ampliar los centros de Primaria y Secundaria, pero con dinero de la Conselleria, no como la alcaldesa, que pretende solucionar los problemas que no cubre el gobierno autonómico con fondos municipales.

¿Qué modelo de ciudad plantean frente a la fuerte caída que ha sufrido el sector del ladrillo?

Proponemos rescatar el Plan General y redefinirlo a partir de criterios de participación ciudadana. Mantendremos los silos de San Blas, el barrio del Puerto, convertiremos Tabarca y Aguamarga en un parque natural, entre otras muchas medidas.

La austeridad presupuestaria en los nuevos gobiernos municipales será obligatoria, ¿cómo piensa llevarla a cabo?

Inmediatamente reduciríamos el volumen de los cargos de confianza, con lo que ahorraríamos un millón de euros al año. Además, propondremos una reducción de sueldo de los concejales como mínimo de un 15% y, por supuesto, los servicios públicos dependerían de empresas vinculadas en su totalidad al consistorio, no de concesiones a firmas amigas como hasta ahora.