El exdelegado del Colegio de Ingenieros en Alicante, Florentino Regalado, ha explicado que las estructuras de los edificios de modernos de Lorca soportaron bien el terremoto. En cambio, lo que provocó las víctimas mortales fue la caída de elementos como "los acabados y cerramientos que se van a acumulando sobre las estructuras sin orden ni concierto", por lo que consideró necesaria una mayor regulación sobre la construcción de estas partes de las edificaciones.

Regalado indica que "no hay ninguna normativa que obligue a construir los edificios con fachadas o elementos superpuestos a las estructuras cumpliendo unos requisitos determinados", cuando ha habido fallecidos por caerles ladrillos o piedras.

En cuanto a los pilares y vigas, opina que "bastaría con cumplir la norma de construcción del hormigón correctamente, aplicar un poco de sentido común y unos detalles constructivos adecuados para que sean capaces de soportar estos terremotos", pues las únicas que no han aguantado el seísmo son "las hechas de muros de carga de épocas pasadas que se acumulan como castillos de naipes" al ampliar viviendas antiguas.

Para Regalado, "da rabia pensar que puedan endurecer la normativa sísmica y obligarnos a gastar dinero en calcular estructuras más reforzadas, con más coste y consumiendo recursos del país en dinero y CO2, en vez de coger el toro por los cuernos". Esto sería así, indica, porque "se legisla lo fácil, como en la normativa contra incendios, donde obligan a instalar estructuras que resistan dos o tres horas de fuego, lo cual es una idiotez pues nadie está tanto tiempo en un edificio en llamas. Y, mientras, nadie regula el contenido a pesar de que en los incendios en las discotecas, por ejemplo, la gente muere asfixiada o aplastada a causa del humo".

El exrepresentante de los ingenieros considera que "si obligaran a instalar marquesinas en todas las entradas y salidas de los edificios, hubieran protegido de la caída de los cascotes a las personas que escapaban". También apunta que "si se hubiera educado a la gente para que durante un terremoto se quede dentro del edificio debajo de los dinteles o de las vigas, o que se vaya en medio de la calle, esto no hubiera pasado".

Regalado opina que en Alicante un seísmo así quizás hubiera tenido menos efecto "porque nos hemos cepillado el patrimonio" y los edificios son más modernos", aunque el problema con los cerramientos hubiera sido el mismo que en Lorca. Además, lamenta que no haya "comités de expertos preparados para hacer frente a situaciones de emergencia" y que, a pesar de que llamó a la subdelegada del Gobierno para ofrecerse a echar una mano en la localidad afectada, nadie les había llamado ayer para que asesoren.