Con la corrupción como blanco de sus críticas y la apuesta por un modelo de ciudad más participativa y sostenible como mensaje, el candidato de Compromís a la Alcaldía de la ciudad, Tomàs Mestre (1964), afronta esta carrera hacia la cita electoral del próximo 22 de mayo como una oportunidad de involucrar a la gente en un proyecto de futuro, que deje de lado un modelo de gobierno "en el que el político no sirve a la ciudadanía sino que se sirve del ciudadano".

Días intensos de campaña electoral. ¿Con qué se está encontrando Compromís en la calle?

Con un electorado receptivo a escuchar unas propuestas que puedan representar un cambio para Alicante. Un trabajo de acercamiento a los vecinos con el que queremos combatir el descrédito de la clase política que ha generado el Partido Popular. Estamos haciendo una campaña muy de calle, con mucha ilusión pese a los intentos del PP y del PSOE de jugar un periodo electoral a dos bandas y de baja intensidad.

¿Qué alternativas plantean frente a ese descrédito?

Para nosotros el ayuntamiento debe ser un auténtico motor para la ciudad, debe ser un ejemplo de generosidad en el que las fuerzas políticas, empresas, sindicatos trabajen a favor de medidas efectivas para la promoción del empleo. Queremos un modelo de ciudad con un urbanismo racional, con medidas de integración eficaces. Un ayuntamiento de cristal, en definitiva, que garantice la transparencia y deje al descubierto la corrupción.

¿Qué proyectos sustentan los compromisos electorales de la formación que encabeza?

Centramos nuestros objetivos en la necesidad de dar un impulso real al Arco Mediterráneo y a sus posibilidades, a políticas efectivas que respalden al pequeño comercio, a dar cobertura a infraestructuras necesarias como el tercer hospital y a que casos como el estado crítico al que han llegado colegios como el Manjón Cervantes no vuelvan a repetirse.

¿Qué supondrían para Alicante cuatro años más de gobierno del PP o una legislatura bajo la batuta socialista?

En ambos casos cuatro años estériles para el crecimiento de esta tierra, de descontento, de actuaciones en las que se ha perdido la esencia de que la política está para servir a la ciudadanía y no para servirse del ciudadano. Para nosotros ambos partidos son cómplices, un PP que ha sido hasta ahora el problema y un PSOE que no es la solución.

¿Cómo evalúa y qué efectos cree que pueden tener los desencuentros vividos tanto a nivel autonómico como municipal con Esquerra Unida (EU)?

Concurrimos a los comicios con tranquilidad y mucha serenidad, con unas propuestas de trabajo sólidas, con unas iniciativas que son muy diferentes a las de EU. En aquel capítulo algunos, como es mí caso, no fuimos protagonistas. Somos otra fuerza política, así que lo que pasó pasado está.

Defínase a usted mismo ¿Quién es Tomàs Mestre y qué puede aportar a Alicante?

Soy un ciudadano apasionado por esta ciudad, alguien con una trayectoria que evidencia una preocupación por las cosas que ocurren a nuestro alrededor, así como con unas ganas enormes por participar e involucrarme, algo que he vivido intensamente desde la cultura, a la que estoy muy vinculado por el teatro, o en la educación a la que me dedico profesionalmente. Es por este motivo que llamo a una rebelión cívica para que no quede anulada la posibilidad de transformar las cosas.