El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Cayo Lara, se sumó ayer a la ola de críticas que ha recibido el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, por criticar esta domingo al abuelo de José Luis Rodríguez Zapatero, fusilado en 1936 por las tropas franquistas. "No tiene autoridad moral ni política para deshonrar la memoria de miles de personas que aún continúan enterradas en las cunetas de este país", sentenció el dirigente ayer en Alicante. Lara se desplazó hasta la ciudad para participar en dos actos. Por la mañana ofreció una rueda de prensa para arropar al alcadable del partido, Miguel Ángel Pavón, y por la tarde participó en un mitin en el Pabellón de Florida Babel, al que asistieron alrededor de cuatrocientas personas.
Durante su comparecencia ante los medios, el coordinador general de IU fue contundente. Y no sólo con Camps, al que además calificó como "el mayor coleccionista de trajes regalados de este país", y del que dijo que "sus palabras son un retrato de su propia persona y representan una indignidad". Lara repartió más leña. Sus ataques más feroces fueron para el Gobierno central. Censuró, por ejemplo, los 10.000 millones de euros anuales que, según la asociación Europa Laica, la Iglesia percibe del Estado. El máximo dirigente de IU instó al Ejecutivo a destinar ese dinero a potenciar el empleo y subrayó que con esa cantidad se podrían crear 400.000 puestos de trabajo, a razón de 25.000 euros anuales cada uno. "A la iglesia a rezar y al colegio a aprender", apuntó.
Lara también se refirió a la reestructuración que han sufrido las dos principales cajas de ahorro de la Comunidad (CAM y Bancaja). Subrayó la necesidad de que "se reconviertan en banca pública" y emplazó al Estado a que les obligue a abonar los dos años de paro de los cerca de 4.000 trabajadores de ambas entidades que podrían ser prejubilados.
"Bipartidismo estéril"
Al margen de las críticas, el coordinador general de IU también quiso ensalzar la valía de Miguel Ángel Pavón. "Tiene solvencia y va a luchar a muerte contra la corrupción política", sostuvo. Además destacó que "va a llevar su alma laica al Ayuntamiento de Alicante" y prometió que "defenderá los valores clásicos de la izquierda". En opinión del propio Pavón, el PSOE ha sido incapaz de hacerlo durante los últimos cuatro años. "Vamos a conseguir entrar con fuerza en el Ayuntamiento para romper el estéril bipartidismo de populares y socialistas". Así comenzó su discurso.
A diferencia de otras intervenciones anteriores, Pavón recrudeció ayer sus palabras contra estos dos partidos y quiso trasladar a la ciudadanía un mensaje claro, conciso y directo: "EU quiere ser decisivo para transformar la ciudad y dejar atrás la economía especulativa del pelotazo urbanístico". Tras esa declaración de intenciones, llegó el turno de la corrupción. "Vamos a luchar contra ella, a diferencia de otros partidos. Sólo hay que ver el tándem que forman Castedo y Ripoll en los dos primeros puestos del PP. Ambos están implicados en Brugal, una implicada y el otro imputado, y han demostrado que el PP no tiene ninguna credibilidad en esa lucha contra la corrupción", sentenció.
Junto a Pavón y Lara también estuvo la coordinadora general de EUPV, Marga Sanz. Destacó que las expectativas electorales del partido "son muy buenas" en la Comunidad y subrayó que se va a consolidar como la tercera fuerza política valenciana. "Somos la única voz contundente de la izquierda que defiende una salida social de la crisis. Por eso pedimos el voto de todos los ciudadanos que están sufriendo serias dificultades económicas", subrayó la dirigente.
