El presidente del Partido Popular de la Comunidad Valenciana y candidato a la reelección como presidente de la Generalitat, Francisco Camps, prometió ayer poco menos que el paraíso de la oferta cultural y de la libertad de expresión como caldo de cultivo de la actividad artística si sale reelegido para la jefatura del Consell.

Camps presentó su programa en materia cultural en un acto celebrado en el valenciano Monasterio de San Miguel de los Reyes, y allí no dudó en comprometerse a insuflar una "importante inversión" en cultura pese a la crisis económica general que atraviesa España y la monumental deuda que arrastra el Consell en todos los ámbitos.

Camps destacó ayer que "una de las grandes apuestas" de su mandato "ha sido el audiovisual" y la puesta en funcionamiento de Ciudad de la Luz de Alicante, donde, según sus palabras, se ha hecho una "inversión multimillonaria", una cifra que no ha desvelado porque es "un dato mareante", reconoció. Con todo, aseguró que va a dedicar "un esfuerzo extraordinario" a esta infraestructura alicantina para seguir ayudando a la producción en la Comunidad y que siga siendo una "referencia inexcusable en España y Europa".

Asimismo, el candidato popular destacó que durante los ocho años en los que ha sido presidente de la Generalitat, el gobierno que preside ha hecho "el mayor esfuerzo económico" de todas las autonomías con 1.000 millones de euros en equipamientos y oferta cultural, algo que, reseñó, ha convertido a la Comunidad Valenciana en la segunda autonomía con mayor número de museos y auditorios y la tercera en número teatros y bibliotecas.

Camps subrayó ayer que en la Comunidad "los creadores estarán siempre apoyados piensen lo que piensen y sueñen lo que sueñen" y se comprometió a que "cualquier persona que quiera realizarse como artista pueda hacerlo, hable la lengua que hable, piense de la forma que piense y milite en el proyecto que milite, porque lo importante no somos nosotros, sino la creación" y "la creatividad no puede tener límite". Sin un ápice de autocrítica durante su discurso, el jefe del Consell no hizo ninguna alusión ni pidió disculpa alguna por el hecho de que la Unió de Periodistes se viera obligada a retirar el año pasado su exposición "Fragments d'un any" ante la censura política que llevó a cabo el Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MuVIM), dependiente de la Diputación de Valencia, cuya dirección descolgó diez de las 91 fotografías que integraban la muestra apenas unas horas después de su inauguración. Las imágenes censuradas eran ocho fotos de temática política, algunas relacionadas con el caso Gürtel, y dos más en las que aparecían el expresidente del Gobierno José María Aznar en su investidura como doctor honoris causa por la Universidad Cardenal Herrera-CEU y el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, con el arzobispo de Valencia, Carlos Osoro.

Camps tampoco explicó ayer por qué no admite preguntas de los periodistas y si esto forma parte o no de la libertad de expresión.

MONASTERIO DE SAN MIGUEL

Una lectura de Azorín y un grafitero para amenizar la velada

La jornada cultura estuvo amenizada por un grupo de jazz dirigido por el guitarrista Ximo Tébar, y los asistentes también pudieron disfrutar de la lectura de un fragmento del libro "Valencia" de Azorín que realizó la actriz e hija de Adolfo Marsillach, Blanca Marsillach, y de un poema de Ausiàs March, que recitó el filólogo y dramaturgo Manuel Ángel Conejero. El premio Nacional de Danza Ramón Oller, junto a una bailarina, interpretó una coreografía ante el mural en el que el grafitero Plácid Cervera pintó el lema del PP "Centrados en ti". Entre los representantes del mundo cultural se encontraban el escultor Miquel Navarro, el diseñador Alex Vidal, los pintores José María Iturralde y Horacio Silva, los artistas plásticos José Antonio Orts y José Sanleón, el director de orquesta García Asencio, los arquitectos José María Lozano y Ramón Esteve, los directores de cine José Escrivá y Miguel Perelló, el torero Vicente Barrera, a quien prometió el mantenimiento de las corridas, y el diseñador Francis Montesinos.