El portavoz del PSPV en las Cortes Valencianas, Ángel Luna, afrontó ayer la sentencia absolutoria dictada a su favor por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad cargando contra la "política de corrupción desplegada" por el Partido Popular en la autonomía. Resolución judicial en mano, el síndic socialista advirtió de que el fallo -en el que se descarta que incurriera en un delito de encubrimiento, al afirmar que desconocía la procedencia del informe bajo secreto de sumario sobre el caso Gürtel que exhibió en las Cortes Valencianas- significa "el fracaso de Francisco Camps, de Mariano Rajoy y de la corrupción".

El dirigente socialista mostró su "satisfacción" por el resultado del proceso advirtiendo de que este pronunciamiento significa un paso más en "la guerra contra la corrupción dando fuerza a quienes intentamos levantar la voz exigiendo explicaciones a los que gobiernan aquí y a quienes están en otros escenarios como Madrid". Un paso más que "refuerza la posición" de aquellos que "luchamos por la transparencia frente a quienes defienden la gestión de la opacidad".

Junto al secretario general del PSPV, Jorge Alarte, Luna afrontó ayer su primera intervención ante los medios de comunicación tras conocerse este movimiento judicial que le situó hace ahora justo una semana en el banquillo de los acusados. Con este escenario, el parlamentario del PSPV calificó la situación que ha arrastrado de "lamentable" desde el punto de vista público, al entender que "ha puesto en evidencia que el Gobierno valenciano no ha cumplido con sus obligaciones democráticas". Una realidad que se resume en el hecho de que el "PP ha perdido" este envite.

Apuntando de forma directa al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, salpicado por la causa de los "trajes" de Gürtel, Luna advirtió de que en este procedimiento seguido contra él "se ha jugado con el concepto de ejemplaridad" llevando a los juzgados a "quiénes piden cuentas por su gestión al Gobierno valenciano", ya que si la Generalitat "cumpliera con sus obligaciones, diera explicaciones sobre cómo utiliza el dinero público, contestara a los diputados de la oposición y permitiera acceder a los expedientes de contratación, nunca hubiéramos llegado a este procedimiento".

En una dirección similar, el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, sentenció el desenlace de esta causa incidiendo en que al final "la verdad se acaba imponiendo". Así, destacó que la "absolución evidencia que no hay que tener miedo a Camps, que desde el discurso de la dignidad, de la honradez y de la ética la verdad sale a la luz y el Estado de Derecho acaba funcionando". Jorge Alarte añadió otros nombres propios a su lista de "culpables" para exigir a Rajoy y en general a todo el PP en la Comunidad Valenciana que "cesen en su actividad de acoso y de degradación de la vida democrática valenciana, de empequeñecer nuestras libertades públicas y de poner en cuestión todo, hasta el derecho de los parlamentarios a exigir explicaciones".