Loterías, primitivas, quinielas o cupones de la ONCE. Los alicantinos gastarán este año unos 550 millones de euros en estos juegos de azar. Un desembolso importante que, sin embargo, cae en picado desde el inicio de la crisis. Así, este año se gastarán 28 millones de euros menos que el año pasado para tentar a la suerte y 89 menos que en el año 2007. Los vendedores creen que la bajada de ventas ha tocado fondo y esperan comenzar a recuperarse a partir del próximo año.

Mantienen esa esperanza porque, a pesar de la caída de los ingresos, la gente no ha dejado de comprar y sigue buscando la suerte. Sin embargo, los problemas económicos por los que atraviesan muchas familias han hecho que compren menos o que lo hagan de forma más esporádica, como ocurre con la lotería nacional o los cupones, o que reduzcan el importe de sus apuestas en las primitivas o quinielas.

En estos últimos juegos de apuestas la recaudación ha descendido sensiblemente, pero el número de jugadores ha aumentado en el último año, como sostiene el delegado comercial de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) de Alicante, José Miguel Romero, quien explica que "juega más gente, pero gastan menos dinero en cada apuesta".

Sólo en lotería nacional los alicantinos gastarán unos 264 millones este año, 17 menos que el año pasado. Es el juego de azar en el que más dinero se invierte y la estrella es el sorteo del Gordo de Navidad, para el que este año también se prevé un descenso en la recaudación. De hecho se han puesto a la venta décimos por valor de 145,5 millones de euros en la provincia, 9 millones menos que en 2009. El responsable de la LAE en Alicante estima que se venda alrededor de un 78% de la lotería consignada para el 22 de diciembre.

"No se vende más, pero no creo que haya alguien que no lleve nada de lotería para el sorteo", afirma. Romero explica algunas de las situaciones de crisis que han influido en la reducción de las ventas: "Antes había muchas empresas que compraban un décimo para sus empleados y ahora no lo hacen. Además, hay muchas personas sin empleo". Las ventas del sorteo de Navidad "están siendo lentas, porque las familias van ajustadas y retrasan la compra para ver cuánto pueden gastar".

Las primitivas, en las que se engloban los juegos de la Bonoloto o el Euromillones, son el segundo juego en el que más dinero gastan los alicantinos, unos 160 millones de euros al año. El conjunto de estos juegos ha descendido en menor medida que la lotería (entre un 1% y un 2% anual desde el inicio de la crisis) y, en el caso del Euromillones las ventas han aumentado un 13% este año. Desde la LAE sostienen que en tiempos de crisis este juego gana adeptos por sus premios multimillonarios. En la provincia la inversión en este juego ha crecido en mayor medida que la media nacional "debido al gran número de residentes europeos", apunta Romero. "Resulta más caro que una primitiva y la probabilidad de ganar es menor, pero los premios son mayores y ha llegado a haber botes de 100 millones de euros", señala.

En cuanto a las quinielas, la reducción de las ventas será de aproximadamente un 5% este año y se recaudarán unos 20 millones de euros. Ocurre igual que en las primitivas, que hay más adeptos pero invierten menos dinero, según Romero. Y es que "un euro o dos no hace pobre a nadie y la gene sigue jugando para buscar la suerte hoy más que nunca". Otras apuestas, como el Quinigol, Lototurf o Quíntuple Plus también han reducido sus ventas a consecuencia de la crisis económica.

Las ventas de juegos de la ONCE -cupones, rascas, 7/39 o el Súper Once- son los que han experimentado una mayor caída en la provincia, pues se ha pasado de los 136 millones que se gastaban los alicantinos en 2007 a los 105 millones de 2010. El jefe de juego de la ONCE en Alicante, Felipe Cremades, explica que con la crisis muchos jugadores "han dejado de jugar su cupón diario y ahora juegan uno semanal o en lugar de comprar tres cupones sólo adquieren uno". De esta forma, "siguen comprando, pero menos". En el caso de los rascas "estamos aumentando las ventas porque hemos logrado captar a mucha gente joven, pero el aumento de ventas no compensa la caída", ya que son los cupones la principal fuen te de ingresos.