"Las cosas están difíciles ahora por la crisis, y más para nosotros, porque se han marchado algunos de los inmigrantes que vinieron a Alicante y que eran parte de nuestra clientela", señala Ricardo Ernesto desde su puesto de productos latinos. Los placeros argentinos dedicados a la carne también han notado la crisis, ya que en general los inmigrantes "consumen mucha carne sobre todo los fines de semana cuando se juntan en grandes comidas familiares y, si se marchan, se nota". Con todo, señalan que poco va aumentando el número de clientes españoles "que se están acostumbrando al tipo de corte argentino y hay muchos que lo prefieren". En cuanto a las frutas y verduras, los vendedores de productos importados también venden nacionales y sus clientes son mayoritariamente españoles.