La última tribuna que me hubiera gustado escribir es ésta que aquí escribo para honrar la memoria del amigo fallecido, más un hermano que amigo, y me han de faltar las palabras para expresar lo perdido.

Pasión y devoción sin límite para todos. La Fundación Vicente Ferrer tuvo en Ricardo a uno de sus grandes apoyos y jamás escatimó esfuerzos para atender a los desfavorecidos. Su amor por su profesión era tanta, como el que dedicó a su familia y amigos.

A los 45 años nos ha dejado, en su plena juventud, el mejor amigo, uno de los más grandes profesionales de la urología a nivel nacional. Premio extraordinario fin de carrera en la Facultad de Medicina de la Universidad de Alicante y en la actualidad jefe del Servicio de Urología en el Hospital San Jaime de Torrevieja, donde su falta irreparable será de difícil sustitución.

No ha sido suficiente toda su ilusión en los avances y adelantos en la medicina y su lucha hasta el final para ganar una batalla que no ha podido superar. Él nos transmitió a todos tanto optimismo en su pronta recuperación que ya estábamos haciendo planes para el futuro. No ha podido ser.

Deja dos preciosas hijas, Alicia y Alejandra, y un hijo, Ricky, quienes sin duda continuarán su obra humana y profesional en todo aquello a lo que puedan dedicarse. La grandeza y la pasión está en sus genes. Vuestro padre me pidió que si esto ocurría y necesitábais saber de él, contárais conmigo. De su grandeza y bondad muchos podrán contaros, pero yo las he vivido con él, y conmigo tendréis ayuda y consuelo. A vuestro lado tenéis una gran familia que cuidará de vosotros, el recuerdo de vuestro padre lo llevaréis siempre dentro. Un abrazo muy fuerte a tu mujer, Sonia; a tus padres, Ricardo y Pilar; y a tus hermanos Germán, Miguel y Rafa, como si a él se lo diera.

Tus amigos quedamos huérfanos de tu grandeza y bondad. Llenabas nuestras vidas con tu alegría y tus ilusiones. Ahora tendremos que aprender a vivir sin ti.

Gracias por haber sido como eras. Son muy pocos los amigos que en las alegrías y en las tristezas están siempre contigo. Tú eras uno de esos. Amigo del alma, nunca te olvidaremos.