No son médicos, psicólogos, ni psiquiatras, pero posiblemente son quienes mejor conocen la esquizofrenia, sencillamente porque la padecen.

Un grupo de ocho personas con enfermedad mental, usuarios del centro de salud Ciudad Jardín de Alicante ha creado, en base a su experiencia personal, un curso dirigido a profesionales del campo de la medicina con el objetivo de prevenir la recaídas en su enfermedad.

Una iniciativa, totalmente pionera en España, que ha llevado a este grupo de personas con enfermedad mental a impartir varias charlas a psicólogos y psiquiatras, la última hace unos meses en el marco de un congreso organizado en Valencia por la Asociación española de Neuropsiquiatría. En ellas, han mostrado a los facultativos su visión sobre cómo prevenir las recaídas en su enfermedad y cómo tratarlas. "Aunque no somos médicos nuestra experiencia con la enfermedad nos permite ser unos buenos terapeutas", explica Jorge Rincón, uno de los protagonistas de este proyecto. Una experiencia "que además nos ha sido muy útil para aprender unos de otros estrategias para hacer frente a la esquizofrenia", asegura Puri Pol, quien también ha participado en este proyecto.

Para dar forma a este curso, recogido en un manual en DVD y un "making off" explicando cómo se hizo, este grupo de pacientes ha estado trabajando dos años coordinados por Manuel Girón y Begoña Beviá, psiquiatra y enfermera del centro de salud Ciudad Jardín. El grupo "se reunía un a vez por semana y todas las sesiones eran grabadas en vídeo", explica Manuel Girón. "En cada una de estas sesiones, los participantes abordaban un aspecto de las recaídas en su enfermedad y de cómo prevenirlas y tratarlas". Se trata de "desmenuzar la anatomía de una recaída y de detallar todo el proceso". Posteriormente Girón y Beviá analizaban y ordenaban esta información con la que se ha creado este completo curso que ha recibido una subvención del Ministerio de Sanidad y que ha contado con la colaboración de Lluis Llach, quien ha cedido de manera gratuita sus canciones para ilustrar el DVD.

Algunas de las conclusiones más importantes que se trasmiten a través de este curso, explica una de sus autoras, Maribel Picó, "es que la medicación es importante a la hora de prevenir una recaída, pero no es lo único. Es fundamental que estemos ocupados, que tengamos una rutina y que nos relacionemos con los demás". Picó también espera que el trabajo desarrollado por ella y sus compañeros "sirva para que los médicos no confundan las fases previas con la recaída y de esta manera se puedan evitar con mayor eficacia".

Una experiencia que ha sido extremadamente enriquecedora para sus protagonistas. "Nos hemos sentido llenos de positividad", asegura Antonio Jesús García. Por su parte, Puri Pol siente que tras esta experiencia "yo manejo mi enfermedad, y no al contrario".

Los psiquiatras y psicólogos que han tenido oportunidad de escuchar las lecciones de estas personas con enfermedad mental "se ha mostrado muy sorprendidos, sobre todo por su soltura a la hora de explicar su experiencia y contestar a las preguntas que les hacían los médicos", afirma Begoña Beviá. Los facultativos, añade Beviá, coinciden además "en el cambio de chip que supone esta iniciativa, ya que para ellos es un choque ver que estas personas pueden aportarles algo sobre la esquizofrenia". Y es que para Maria del Carmen Navarro, otra de las personas con enfermedad mental que han participado en este trabajo, "la relación entre el médico y el paciente debe ser de cooperación, porque una enfermedad psíquica no puede ser tratada de la misma manera que una dolencia física".