Botas, chaquetas de piel, vaqueros, bolsos o, incluso, ropa de hogar de primeras marcas para combatir el frío y la crisis. Un surtido de productos que se pueden encontrar, desde ayer y hasta el próximo martes, en la Zona Volvo del Puerto de Alicante, donde se celebra la III Feria Outlet -abierta desde las 10 de la mañana hasta las 10 de la noche-, aunque ayer tuvo que acabar antes por la lluvia que cayó a última hora.
Con los cuatro días del "puente" del Pilar por delante los cerca de 80 comercios que forman esta nueva feria se enfrentan al objetivo de superar los 250.000 visitantes de la primera edición, algo que será difícil por la previsión meteorológica. "Hemos recortado el número de stands respecto a la segunda edición, pero va a ser un éxito seguro", afirmó convencido el concejal de Comercio, José Antonio Sobrino, quien no pareció temer la llegada de chubascos a la provincia. "Mi única expectativa es que no llueva y que haga frío porque así vendo la ropa de abrigo", explicó uno de estos comerciantes alicantinos a mediodía mirando al cielo.
Cientos de personas acudieron ayer al recinto desde su apertura en una inauguración que también contó con la visita de la alcaldesa Sonia Castedo. La primera edil se mostró satisfecha por los beneficios que obtiene tanto los usuarios como los comerciantes: "La gente tiene una oportunidad de comprar a precios asequibles y los comerciantes pueden desprenderse de la mercancía sobrante". De hecho, los asistentes pueden encontrar descuentos de hasta el 80% en textiles, equipación deportiva, gafas de sol, o muebles, así como precios por debajo de los diez euros.
Las ventas no es el único atractivo que tiene la feria para los participantes, ya que muchos ven en ella la ocasión perfecta para darse a conocer, como es el caso de Alfredo: "Más que las ventas que puedas hacer para nosotros es importante la publicidad".
