Han aprobado por unanimidad que se eliminen los exámenes de recuperación de septiembre y que se traslade a los primeros días del mes de julio esta última oportunidad que tienen los alumnos de Secundaria para pasar de curso.

Son los directores de los institutos de la provincia, que se han puesto de acuerdo en trasladar la cuestión al máximo responsable del departamento de Educación, el conseller Alejandro Font de Mora. Educación tiene la última palabra en un asunto en el que las provincias de Castellón y Valencia han llegado a la misma conclusión: "Sólo se beneficia un 5% del total de los alumnos que tienen alguna asignatura suspensa, que suman entre un 30% y un 40% cada curso escolar", concreta la portavoz provincial de los directores de Secundaria, Laura Oliva.

El informe en el que se basan los directores, tras un sondeo realizado en institutos de toda la Comunidad, revela que apenas superan los exámenes de septiembre medio millar de estudiantes entre los más de 10.000 que arrastran asignaturas pendientes al final del curso en Secundaria.

Ir al compás de la Universidad

Mejorar el funcionamiento de los centros, simplificando su engorrosa organización actual, es una de las principales premisas por las que los directores quieren cambiar las fechas de estos exámenes de recuperación. "El volumen de suspensos es muy importante pero muy pocos aprovechan la oportunidad de septiembre, prácticamente los alumnos que sólo tienen parte de una asignatura o una sola materia, y con notas que rondan casi el aprobado".

Recientemente el curso que arroja más repetidores es tercero de ESO. "No sabemos por qué ha desbancado a segundo, que era el curso más complicado para los chicos hace unos años", indican los directores. Pero la inmensa mayoría de los suspensos "ni siquiera se molesta en presentarse en septiembre porque coincide con que arrastran más de tres y de cuatro suspensos".

También contribuye a esta resolución sobre el cambio de fechas de los exámenes de recuperación, el adelanto del inicio del curso que han experimentado las universidades. Con el objetivo de homologar en lo posible las fechas con el resto de las universidades europeas, este mismo año ha sido el primero en el que los estudiantes universitarios han empezado las clases en Alicante antes incluso que los institutos, hasta el punto de que los exámenes de selectividad todavía no habían terminado y las clases en la universidad ya habían dado comienzo. "Tenemos que ir con los tiempos y acomodar todas las enseñanzas en cadena porque hoy por hoy es una locura organizar el inicio del curso que, en realidad, se prolonga a la hora de matricular a los estudiantes de los institutos hasta bien entrado el mes de octubre", asegura la portavoz provincial de los directores.

Además sostienen que cuando no había recuperación en septiembre, los profesores aprobaban a los que se quedaban a las puertas de sacar el cinco, pero que con la repesca "prefieren mandarlos a todos a septiembre para que repasen durante el verano. Estos estudiantes, que son precisamente la gran mayoría de los que acaban pasando de curso, podrían aprobar igualmente con la recuperación en julio".

En opinión de los directores el resto de suspensos suelen serlo "de solemnidad" y aseguran que la experiencia en los institutos demuestra que "los padres se equivocan al pensar que la convocatoria de septiembre es como lo de ir a Lourdes".