Los efectos de los recortes presupuestarios por la crisis se van notando en las comisarías de la provincia. El Ministerio del Interior ha limitado los gastos para las reparaciones de coches patrulla. lo que está obligando a reducir las flotas en la calles, mientras que en Elche se están utilizando uniformes de segunda mano ante los retrasos en la llegada de los nuevos trajes. La Confederación Española de Policía (CEP), uno de los sindicatos policiales mayoritarios, denunció ayer estas carencias que tildó como "despropósitos" para afrontar la escasez de medios como consecuencia de la crisis.

El sindicato policial denunció ayer que como consecuencia de esta situación la Comisaría de Alicante ha retirado cuatro de los doce coches que tienen para patrullar la ciudad, que permanecen en un garaje reservados para sustituir a los que sufran una avería, ya que no hay dinero para arreglarlos en caso de que ocurra algún percance.

Según las estimaciones de este sindicato, en estos momentos la ciudad cuenta con cuatro coches menos en sus calles como consecuencia de la situación. En un primer momento, los problemas empezaron a surgir con los vehículos camuflados. Ahora la situación se ha extendido también a los coches patrulla. La CEP criticó que en Dénia un funcionario ha sido retirado de su puesto a la oficina de denuncias después de que éste alertara de que el vehículo que conducía presentaba graves deficiencias de frenada. El sindicato advirtió que presentaría una denuncia contra los responsables de esa comisaría en el caso de que algún funcionario sufra algún accidente en ese coche por problemas con los frenos.

El secretario provincia del sindicato, Onofre Simón, ironizó diciendo que a este paso "dentro de poco los policías patrullarán a pie o en autobús como en los años de la transición". Simón cuestionó el hecho de que Alicante tenga el mismo número de coches patrulla que poblaciones como Elche o Benidorm, cuando proporcionalmente el número de habitantes al que hay que dar servicio es mucho mayor.

El Ministerio del Interior ha dado orden de que no se repare ningún vehículo hasta que no haya una autorización expresa, con el objetivo de controlar el presupuesto y que no se dispare el gasto. Desde la Comisaría se incidió en que hay un remanente de coches en los garajes que están de reserva ante cualquier percance, pero que el número se vehículos se iba fijando según las necesidades del servicio. Las mismas fuentes insistieron en que gran parte de estas flotas estaban compuestas por vehículos adquiridos mediante el sistema de leasing, por lo que tenían incluido el mantenimiento. Sin embargo, este mismo sindicato denunció que en los casos de leasing cada vez con mayor frecuencia las empresas se niegan a cubrir el coste de la reparación de los coches.

Respecto a los nuevos uniformes del Cuerpo Nacional de Policía, los problemas se están registrando en la Comisaría de Elche ante los retrasos en la entrega de estos trajes. Según denunció el CEP, ante esta situación se están recolectando "uniformes viejos, remendados y con más años de servicio que los que tienen algunos de los funcionarios que los portan". Los uniformes proceden de aquellos sitios donde ya han llegado las nuevas prendas, como es el caso de Alicante, para así poder garantizar que los agentes llevan el equipo completo.

Desde la Comisaría se apuntó que este problema en concreto se debe a que los uniformes se estaban adquiriendo de manera escalonada y que en breve en Elche, se recibirán también los nuevos trajes.