Concepeción lleva varios años luchando por poder entrar en una residencia. Dice que está sola, no tiene familia y lo único que quiere es ir allí para que la cuiden y poder estar con sus amigas. Parece que ni con 100 años reúne las condiciones necesarias.

¿En qué aspectos cree usted que ha mejorado la vida a lo largo de estos años? ¿Se vive mejor hoy que antes?

No. Yo creo que antes había más humanidad y más cariño. Todo lo bueno que tenían las personas se ha perdido y se va a perder aún más.

¿Y en Alicante?

En la actualidad hay mejor ambiente ahora que cuando yo vine. Porque cuando llegué en la plaza de los Luceros estaba la "Montanyeta", que daba muy mala imagen a la ciudad.

¿Qué momento de su vida recuerda como decisivo?

Cuando salí de Madrid, que fue al acabar la guerra. A mi marido se lo llevaron al frente, a Guadalajara, y ya no lo volví a ver. Yo me casé con 22 años, a los 24 ya no tenía marido. Supongo que moriría, porque si no hubiera vuelto. Él me quería mucho. Entonces me vine a Alicante, porque tenía unos amigos que vivían en la Rambla. Me dijeron que vendían un quiosco en Alfonso el Sabio y me pusieron en contacto con el dueño. Usé las 30.000 pesetas que tenía para comprarlo.

¿Hay algún suceso histórico que recuerde usted en especial?

Cuando mataron a Kennedy estuve tres días sin poder cerrar el quiosco. Fueron los taxistas los que me ayudaron en esos momentos, que me traían comida y algún refresco.

¿Se imaginaba hace años que el mundo llegaría a ser como es hoy, en el siglo XXI?

No. No me imaginaba que pudiéramos llegar a las cosas que veo ahora. Todo es matar y matar. Ayer mismo un hombre vio a su compañera en la calle y la mató con un palo porque ella quería separarse. Esas cosas en mis tiempos no existían.

¿Cree usted que ha mejorado la situación de las mujeres con el paso del tiempo?

Nada. Al contrario, ha empeorado en todo. Ahora son las mujeres las que trabajan y llevan el dinero a casa, porque hoy trabaja mucho la mujer, pero sigue maltratada.

.¿Cree que antes los maridos no pegaban a sus mujeres?

Claro que los maridos pegaban a sus esposa pero, como no había tele, pues no lo veíamos. Ahora te lo ponen claro y transparente en la televisión. Hoy no se le da importancia a la vida.

Usted ha debido ver muchos cambios de moneda en España, ¿se ha acostumbrado al euro?

Pues yo lo llevo muy mal porque no veo. Siempre tengo que ir a expensas de otra persona. La mayor cantidad de dinero que he tenido ha sido un billete de 50 euros, mi pensión de autónoma es pequeña.

¿Ha habido algún invento que haya hecho su vida más fácil a lo largo de estos años?

La televisión es lo único que tengo y me entretiene. Yo siempre he limpiado con mis manos el suelo, hasta que ya no pude.

¿Cree usted que antes había más inseguridad que ahora?

Ahora hay más. Por las noches los jóvenes salen mareados de las discotecas, se meten en el coche y empiezan a poner el "bakalao" y aquí no hay quien duerma.

¿Y qué opina sobre la corrupción de los políticos?

Entre los políticos quien puede roba cinco y el que no puede roba tres. Y el que más puede roba diez. No hay ni uno limpio y puro. Siempre se ha robado, pero menos que ahora. Hoy todos quieren mejores coches, casas más grandes, chalets y todo eso.

¿A qué cree que se debe?

Antes nos conformábamos todos con menos, pero ahora se quiere más de todo, más y mejor.