El sindicato UGT protagonizó ayer una pitada ante la puerta de los juzgados de Benalúa de Alicante para exigirle a la Inspección de Trabajo que haga frente a las condiciones laborales de los trabajadores, como las altas temperaturas,

los problemas informáticos que

bloquean los ordenadores y la falta de folios, material de oficina y hasta de papel higiénico.