Los bomberos del Consorcio Provincial retoman la senda de la protesta tras fracasar ayer la mesa negociadora con la Diputación, que no puede atender el acuerdo de mejora salarial pactado con los sindicatos en 2008 y que sí se ha hecho efectivo hasta diciembre pasado. El diputado del área, Javier Castañer, explicó a los representantes sindicales de los bomberos que la deuda acumulada con la Generalitat -más de seis millones de euros- y con los ayuntamientos de la provincia -más de dos millones y medio- hace inviable el abono del complemento de equiparación salarial con otros parques pactado para el periodo 2008-2011.

Ante este nuevo recorte salarial, que se une al del 5% aplicado por el Gobierno central a todos los funcionarios, los bomberos acordaron ayer protestar ante el pleno de la Diputación del próximo martes y ante la sede de la Generalitat en la plaza de Manises de Valencia una semana después, el día 27. "Además del tijeretazo", explicaron fuentes de la junta de personal, "tampoco se respetan las ayudas sociales, ni se sacan para este año las 22 plazas vacantes tan necesarias para el Consorcio".

Los bomberos de la provincia, que cifran la merma salarial en 3.200 euros anuales para cada agente, califican de "absurdo" el agravio comparativo con sus compañeros de Castellón, que cobran hasta tres euros más por hora.