El magistrado titular del juzgado de Primera Instancia 3 de Orihuela, Carlos San Martín, declinó ayer realizar declaraciones a su salida del Palacio de Justicia de Orihuela y se remitió a los portavoces del TSJ para cualquier aclaración. San Martín, que aparecía por primera vez públicamente, tranquilo y con aspecto informal, en tono amable rechazó hacer cualquier valoración. El magistrado, de 34 años de edad y nacido en Tenerife, es el quinto que se hace cargo de la investigación de la operación Brugal, un asunto que estaría barajando dividir en dos e inhibirse en una parte, la que corresponde la plan zonal, a favor de un juzgado de Alicante para quedarse él la de la contratra de la basura de Orihuela.