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Las incógnitas sobre el presidente valenciano, Francisco Camps, y el ex ministro Francisco Álvarez Cascos, previsible candidato del PP de Asturias, quedarán despejadas antes de que el líder, Mariano Rajoy, coja las maletas en agosto para irse a descansar a su retiro pontevedrés.

La urgencia afecta a los populares valencianos, cuyo candidato todavía está por decidir, si bien la mayoría de las fuentes consultadas cree que repetirá el presidente de la Generalitat, Francisco Camps.

Ahora bien, en comparación con el PP asturiano, hay una salvedad: que la resolución de la candidatura en la Comunitat Valenciana no depende del partido, sino de la Justicia.

El Tribunal Supremo, hace meses, pidió al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que reabriera la investigación a Camps por sus presuntas conexiones con la trama Gürtel.

Aunque el mismo órgano judicial archivó la causa en agosto de 2009, el presidente valenciano se enfrenta un año después a una situación prácticamente idéntica, pues podría acudir a declarar otra vez por el mismo presunto delito de cohecho impropio -los tres trajes de la marca "Milano" que supuestamente aceptó como regalo de la trama Gürtel-.

Mientras el TSJCV toma una decisión, el PP nacional se mantiene a la espera, si bien las fuentes del partido creen que habrá noticias a finales de mes o a primeros de agosto, a más tardar.

Fuentes del PP valenciano están convencidas de que Camps será el año próximo el candidato, más que nada porque confían en su inocencia y creen que en la comunidad reúne el apoyo suficiente para continuar, incluso en el caso, no deseado ni por Valencia ni por Madrid, de que la Justicia le sancione.

Para labrar ese apoyo han sido importantes las gestiones de la dirección del PP, que durante los últimos meses se ha esforzado por apaciguar los ánimos del "zaplanismo", encarnado sobre todo en la figura del presidente de los populares en Alicante, José Joaquín Ripoll.

La corriente pro Eduardo Zaplana es irreconciliable con la de los afines a Camps, puntualiza una fuente del PP valenciano, y por ello es esencial que los dos bandos conserven la paz, y más en un periodo como el actual, en el que el liderazgo del presidente autonómico se ha debilitado.

En la sede nacional de los populares también apuestan por la continuidad de Camps, pero si la Justicia le penaliza con una sanción administrativa, las fuentes reconocen que se complicará la reedición de su candidatura.

EL CASO DE CASCOS

Según han señalado a Efe fuentes del PP, uno de esos enigmas, el de Cascos, ex mano derecha de José María Aznar, ha entrado ya en su fase final y previsiblemente estará resuelto a finales de julio o durante los primeros días de agosto.

El Partido Popular de Asturias intenta desde hace un par de meses acabar con las diferencias que laten aún en el seno de la formación.

Un sector, el del PP de Oviedo, en el que se encuentra el presidente regional, Ovidio Sánchez, prefiere la candidatura de Cascos ante la ausencia de una alternativa.

Pero el otro sector, el del PP de Gijón, es más reacio y ve más inconvenientes que ventajas en la opción del ex ministro.

Sin embargo, por lo que indican las fuentes, "el asunto está muy maduro" y parece que esas gestiones poco a poco se acercan a una posición común: la apuesta por Cascos como candidato en las elecciones al Principado del próximo año.

Es fundamental que la elección de quien en su momento recibió el apodo de "general secretario" del PP se haga oficial durante el verano, ya que la dirección nacional del partido quiere culminar el proceso de proclamación de los candidatos autonómicos entre septiembre y octubre.