Pocas señales indicativas, barreras que impiden el paso de vehículos y carriles por los que sólo pueden acceder los autobuses y los taxis. El acceso a Urgencias del Hospital General de Alicante se puede convertir en un auténtico rompecabezas para los conductores sometidos a unas situaciones las que el tiempo puede ser vital.

El acceso a este servicio se encuentra ubicado en la avenida Maestro Alonso. El problema se presenta cuando los conductores que circulan por la Gran Vía quieren acceder a Urgencias, ya que al girar a la derecha para tratar de entrar a esta avenida un semáforo rojo y una señal indican que éste es un carril sólo para autobuses y taxis. La única opción de entrar desde la Gran Vía es callejear hasta poder acceder a los dos carriles de Maestro Alonso habilitados para que circulen los coches y desde los que se puede girar a la izquierda para llegar a Urgencias. Eso o "saltándote el semáforo en rojo y circulando unos 50 metros por el carril destinado al transporte público", como nos indican los vigilantes jurados del Hospital cuando les preguntamos cómo llegar a Urgencias. Todo, sin ningún tipo de señal de tráfico, ni en la Gran Vía ni en las inmediaciones del hospital, que indique cómo acceder a este servicio. Desde la entrada principal al centro sanitario, por Pintor Baeza, tampoco es posible el acceso a Urgencias. "Los coches tienen que dar la vuelta y entrar por detrás", contestan desde la garita de seguridad ubicada a la entrada del hospital.

Para los usuarios el acceso a este servicio también es un laberinto. "Yo ya me lo sé porque vivo cerca, pero la primera vez que traté de entrar con el coche fue un poco caótico porque por la parte de delante no me dejaban", explica Bouchra, una paciente argelina. José Cañizares también lo tuvo difícil la primera vez que trató de llegar en coche. "Tuve que dar por lo menos tres vueltas hasta que me dijeron que me metiera por el carril del autobús, saltándome una señal de prohibido el paso. No es muy lógico, la verdad".

Desde la Concejalía de Tráfico y desde la Gerencia del Hospital General, aseguran sin embargo que no han recibido "quejas por este problema", pero que "estudiarán" las posibles reclamaciones para tratar de poner remedio a la situación".