"Orígenes" representa a la primera civilización que hubo en Alicante, eso sí, imaginaria. La figura central es una diosa que ejercía de alcaldesa que gobernaba en una alegoría real a la actual mandataria de la ciudad, Sonia Castedo, según admite el artista, Jesús Grao. Sobre ella hay una piedra en la que están grabadas todas las leyes que regían aquella civilización, dictadas por el sol de Alicante que observaba todos los movimientos de los ciudadanos de entonces. Los súbditos, representados en las escenas inferiores, tenían que acatar esas tablas de la ley. En esa ciudad imaginaria en cierto modo se celebraba la Fiesta ya que no había hogueras pero sí fuego y bellezas con la indumentaria de la época, en la que no había una sola representante sino tres, la belleza, su madre y su abuela. En vez de flores la Ofrenda era de animales y de comida. Los animales participaban en la toma de decisiones y se entendían mejor que los políticos de ahora, que no se ponen de acuerdo los de un signo y de otro, cuenta el constructor, que añade que "es como el Avatar alicantino, una civilización totalmente inventada". También habrá referencias a la crisis en esta foguera con siete escenas y 26 figuras en la que destaca la diosa central, que supera los 5.000 kilos. Está construida en madera en más de un 75%.