El secretario general de UGT, Cándido Méndez, aseguró ayer que el paro en la función pública ha sido un éxito a pesar del "hachazo al derecho constitucional de la huelga" que se ha cometido con los servicios mínimos. En declaraciones a los periodistas durante la manifestación central por la huelga celebrada en Madrid, Méndez advirtió, por otra parte, que esta huelga puede significar "el principio de muchas más", y eso dependerá de lo que haga el Gobierno.

Por su parte, el secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, acusó al Gobierno de "maquillar" los datos de participación en la huelga, así como los servicios mínimos decretados. Toxo advirtió asimismo al Gobierno que los servicios mínimos que ha habido en este paro "serán contestados en los tribunales". El sindicalista recordó que esta huelga "la ha provocado el Gobierno" y se convocó porque a los sindicatos no les quedó "otra alternativa", además de advertir que si en el diálogo social no se alcanza un acuerdo para la reforma laboral y"se impone una decisión unilateral que lesione los derechos de los trabajadores", el Ejecutivo "provocará otro conflicto".

Por su parte, Méndez insistió en que los sindicatos están muy satisfechos con el seguimiento del paro y con la respuesta en la calle que, señaló, se ha mostrado no sólo en la manifestación de Madrid, sino también en otras ciudades de España, entre las que destacó Barcelona, Sevilla y Málaga. Méndez prometió poner hoy, en la última reunión sobre la reforma laboral, "toda la carne en el asador" para buscar un acuerdo que infunda confianza. Añadió que la patronal "no puede pensar que la negociación de la reforma laboral sólo puede suponer ventaja para ellos" y consideró "muy difícil" llegar a un acuerdo si se pretende que el diálogo social sea el "sacrificio a sepultar".