Desde la experiencia que le aportan sus más de 16 años en contacto directo con los animales como adiestrador, Leonardo Parra, explicó ayer que más allá de las propias características de los perros, los dueños deben hacer un ejercicio de "responsabilidad y aceptar que tener canes de razas como los rottweiler requiere de unas obligaciones mayores".

Episodios como el acontecido el pasado martes en Alicante, en el que dos perros de este tipo atacaron a dos niñas son, según su opinión, una prueba más de que la gente "no está concienciada" sobre los riesgos.

Según destacó, España "debería seguir la estela de países como Alemania o Estados Unidos para hacer llegar a la gente la idea de que para tener estos animales es necesario que estén adiestrados". Este tema pasa por hacer entender a los propietarios que no pueden "limitarse a poner un bozal al animal y pasar un test, porque estas razas tienen unas características genéticas determinadas, son perros de presa y obedecen a sus instintos".

De igual manera, Leonardo Parra insistió en que cuando un perro protagoniza un ataque de estas características "es difícil reconducir su comportamiento, por lo que en ocasiones sacrificarlo es un mal necesario".