La Concejalía de Sanidad propone una sanción que puede alcanzar un máximo de 22.612 euros para la mujer que custodiaba a los rottweiler que agredieron brutalmente a una niña de seis años el pasado martes en una calle de Rabasa. Desde este departamento le atribuyen la comisión de una falta muy grave por no disponer de licencia para tener canes considerados peligrosos y tres faltas leves por no impedir que los perros se escaparan , así como no tenerlos identificados en el registro autonómico, ni en el municipal como marca la legislación.

En la base de datos del Ayuntamiento figuran 162 casos de animales potencialmente peligrosos, pese a que en la ciudad existen identificados con un chip 1.654 canes de razas conflictivas, lo que significa que al menos el 90% de los propietarios de estos animales incumple la normativa que les obliga a obtener una licencia y registrarlos. Por estos incumplimientos y otros, como llevarlos sin bozal y sin correa, la Policía Local ha abierto una decena de expedientes desde enero de 2009 y la Concejalía de Sanidad ha impuesto sanciones de hasta 2.704 euros.

Según consta en el informe municipal sobre los hechos, realizado a partir de la investigación policial, uno de los rottweiler que cuidaba no estaba inscrito en ninguna base de datos y el otro figuraba a nombre de otra persona. Fuentes de la investigación señalan que este último pertenecía al novio de su nieta y que, al parecer, se lo había regalado, pese a que la mujer no tenía licencia. Este hecho también puede constituir una sanción, si bien como explicó la edil de Sanidad, María del Carmen Román, "la primera responsable es la mujer".

Los dos rottweiler fueron confiscados y se encuentran en la perrera "para estudiar su comportamiento y su posible sacrificio", señaló la concejala. Desde Sanidad proponen que las sanciones para la cuidadora de los perros sean de un máximo de 22.612 euros y un mínimo de 3.300 euros, si bien desde este departamento indican que deberá tenerse en cuenta que la infracción se comete en dos perros, por lo que la cuantía difícilmente se fijará en el grado más bajo. Esta multa es administrativa e independiente a la indemnización que un juez pueda o no establecer por los daños físicos y psíquicos causados a las niñas. La Concejalía también prevé suspender a la mujer para que no pueda volver a tener ningún perro peligroso a su cargo.

No es la primera vez que desde este departamento se ven obligados a sancionar a propietarios de perros. Desde enero de 2009, la Policía Local ha abierto 85 expedientes sancionadores a dueños de perros por incumplir la ordenanza municipal sobre animales y, por ejemplo, llevarlos sin correa. De ellos, una decena fueron referentes a razas calificadas como peligrosas, bien porque los dueños no tenían licencia, los canes carecían de chip, iban sueltos o sin bozal.

El edil de Seguridad, Juan Seva, explica que un 65% de las denuncias que llevaron a los agentes a actuar en estos casos la formularon los vecinos, lo que demostraría la concienciación ciudadana. Una decena de sanciones, frente a los más de 1.500 propietarios de canes peligrosos sin licencia parecen pocas, pero Seva incide en que hay casos difíciles de detectar y apela al civismo de los dueños de estas razas conflictivas.

En el último año y medio, la Concejalía de Sanidad ha impuesto diferentes sanciones por el incumplimiento de la normativa por parte de los dueños de perros potencialmente peligrosos. Por una mordedura causada por un can que no se hallaba dentro de esta clasificación la multa ascendió a 1.352 euros.

Desde Sanidad aseguran que algunas de las razas caninas que se encuentran dentro de la calificación de "peligrosas" son el doberman, bull terrier, dogo argentino, el presa canario o el mastín napolitano. Para poseer uno de estos perros, los propietarios deben dirigirse a la Concejalía y solicitar una licencia para la que necesitan entregar el certificado de antecedentes penales, una declaración jurada de no haber sido sancionado anteriormente por incumplir la ley de animales peligrosos, un certificado médico de aptitud física y psicológica, un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros con una cobertura superior a los 120.000 euros y una justificación de las instalaciones en las que se encuentra el animal. Posteriormente se debe registrar al animal en la base de datos municipal.

El presidente de la Protectora de Animales, Raúl Merida, descartó que los animales vayan a ser sacrificados en breve, ya que están bajo custodia judicial y suelen pasar varios meses antes de que se adopte una decisión en función del informe sobre el comportamiento que realizarán. Inicialmente, Mérida indicó que "Conan" presenta un comportamiento desequilibrado, mientras que el de "Sirena" es normal. El responsable de la Protectora recordó que hace unos años un boxer atacó a una niña en Elda y meses más tarde el juzgado ordenó devolver el perro a su dueño, aunque con la prohibición de que viviera cerca de la víctima.

Por su parte, los padres de la menor destacaron que se han aportado tanto el parte policial como los informes médicos de la pequeña para que judicialmente se evalúe la agresión. Una medida que han adoptado, según insistieron, "para evitar que situaciones como la que padecieron las pequeñas vuelvan a repetirse y la gente se conciencie".

En este sentido, los juzgados de Alicante han registrado varias denuncias por lesiones causadas por animales que suelen tramitarse como faltas y que finalizan con una indemnización al perjudicado.

Asimismo, el delegado del Gobierno en la Comunidad, Ricardo Peralta, aludió ayer a estos hechos subrayando que el ataque debe ser "una llamada de atención para que los que tienen animales peligrosos sepan que deben tener todas las garantía".