- Ex-presidente de la Audiencia Provincial y actualmente en la Sección Segunda, Faustino de Urquía tendrá que jubilarse en agosto de este año, pero va a continuar después sus colaboraciones con la Audiencia, ¿cómo se ha animado a seguir en activo?

Mi decisión de seguir ha venido por un problema puntual. Me toca jubilarme el próximo mes de agosto, pero todavía mi plaza no se va a cubrir hasta bien entrado el segundo semestre del año. El presidente de la Audiencia me lo pidió hace poco como un favor personal y yo le he dicho que sí. Así que, justo al día siguiente de mi jubilación, seguiré viniendo todos los días como si nada hasta que se normalice la situación en la Sección. Luego, una vez cubierta la plaza, continuaré viniendo por aquí mientras me sigan llamando.

- ¿Cómo se lleva eso de seguir en la brecha precisamente cuando los juzgados se encuentran en plena fase de atasco y los casos son cada vez más complicados?

He enfocado esto como una situación temporal, pero estaré encantado de ayudar cuando me lo pidan, como he hecho ahora. Llevo 43 años de ejercicio y por un lado uno ya se cansa. En estos años mantendré mi estatus de magistrado pero la intensidad del trabajo va a ser menor para mí en casos más puntuales.

- ¿Qué piensa sobre el retraso de la edad de jubilación?

A nosotros nos toca jubilarnos a los 70 años. Yo seguiré después pero sólo voy a estar en activo unos pocos meses más. Creo que por mucho que me guste mi trabajo, también hay un momento en el que decir que ya es suficiente y saber desconectar.