El secretario y portavoz de una de las AMPA que ya ha firmado para urgir los ordenadores para sus hijos, Emilio Baidez, confiesa que este curso se ha visto obligado a comprar un ordenador a su hija, en quinto de Primaria, "porque ya tienen que buscar en internet para completar sus trabajos. En cuarto curso lo pueden usar más para jugar, pero en quinto lo emplean estudiar, el profesor les da referencias de webs para que aprendan a aprovechar el ordenador educativamente y en casa saca fotos, símbolos y textos. Es muy socorrido y he tenido que comprárselo, pero si lo tuvieran también en la escuela el profesor les orientaría sobre su uso mucho mejor. Además, muchas otras familias no pueden comprarlo y nuestros hijos van a estar discriminados".

Baidez añade que "para colmo, en nuestro centro llevamos dos meses esperando que técnicos de la Generalitat vengan a arreglar unas incidencias en el aula de Informática donde sólo hay en uso seis de 15 ordenadores".

El portavoz de la Fapa provincial Enric Valor, Gonzalo Anaya, puntualiza que el "malestar" generado por el rechazo de la firma del convenio de los portátiles por parte del conseller "ha ido en aumento con el paso del tiempo y nos reclaman alguna acción para impedir que se agrande la brecha digital con respecto a otras comunidades".

Hay asociaciones que han pensado llamar la atención entregando todos los padres a la vez, en un mismo día, en el registro de la sede de Educación en Alicante, su protesta por la falta de los portátiles, como ya hicieran recientemente los directores de los centros de Primaria.