La Fiscalía propondrá que los menores que dañaron las obras de Ripollés hagan trabajos sociales

La petición asumida por la Fiscalía y que a su vez propondrá al juez, concreta que en lugar de imponer una sanción, ya que los cuatro acusados son menores, se les obligue a desempeñar labores en el centro de paralíticos cerebrales de Alicante. "Mi hijo es paralítico cerebral -afirma Alcalde- y pensamos que sería interesante y constructivo para esos menores ver la suerte que tienen, conviviendo con personas que sufren esa discapacidad y que no tienen la suerte de poder ser como ellos".

El comisario de la exposición "Universo urbano", que se vio en Alicante desde el 1 de octubre hasta el pasado día 11, afirma que su empresa era la que tenía aseguradas las obras por lo que fue la que tuvo que interponer la denuncia para que se iniciara la investigación y se elevará el caso al juzgado. "Se me ocurrió que al final serían los padres los que tendrían que afrontar la sanción y sugerí a Ripollés y a la CAM mi propuesta, y ellos lo vieron oportuno".

Los hechos se remontan al 2 de octubre, un día después de la inauguración de la muestra en el Puerto, cuando fueron dañadas un total de tres piezas del total de 19 ubicadas al aire libre. Por la mañana, apareció una obra completamente hundida en el mar, otra volcada y una tercera rota. Para sacar la que fue arrojada al agua, con un peso de más de 400 kilogramos, tuvo que intervenir una grúa y un barco con pluma. También fue costosa la restitución a su emplazamiento de la escultura que fue volcada al suelo, pese a que la pieza es de bronce y su peso es de 800 kilogramos. La tercera obra dañada apareció sin los dedos de una mano. Lo curioso en este caso es que al estar realizada con polvo de cristal de murano hirió al autor de los hechos en la cara cuando cayó y tuvo que ser atendido. De esta manera, la Policía detuvo al primero de los acusados y a partir de él a los otros tres presuntos autores.