Hay catorce comunidades autónomas que deben tener una teoría distinta sobre la miopía. Lo lamento por los estudiantes, los profesores y los centros de la Comunidad Valenciana". El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, no quiso cargar demasiado las tintas ayer al ser preguntado sobre la decisión del conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, de no adherirse al convenio estatal que dota de ordenadores portátiles a los alumnos. "Respeto las teorías sobre la miopía que tiene cada cual -insistió- pero lamento que esa comunidad no suscriba el convenio".

Añadió que con los once millones programados "se garantizaba que toda la comunidad pudiera tener algo que hemos visto que es un valor" y precisó que los que distribuyen los ordenadores no son ni el Ministerio ni el presidente Zapatero "sino un programa con una financiación para que cada comunidad pueda resolver qué tipo de ordenadores necesita y en qué condiciones".

A este respecto la directora general de Innovación de la Conselleria de Educación, Sofía Bellés, se pronunció ayer en la misma línea de rechazo del conseller pero esta vez respaldando su postura con un nuevo informe "de expertos en Informática que desaconseja la puesta en marcha del proyecto Educa 2.0 sin una serie de acciones previas". El citado documento se refiere a la "necesidad" de una mejora informática de los centros, la instalación eléctrica en las aulas, la transformación del método tradicional de enseñanza-aprendizaje o la elaboración de materiales y contenidos digitales adaptados sin lo que auguran el fracaso del plan estatal.

Por contra para el delegado del Gobierno en la Comunidad, Ricardo Peralta, el fracaso escolar viene dado por la política del Consell: "Es preocupante que una vez más se conduzca a un fracaso que paguen los escolares valencianos ya que el resto tendrán los ordenadores y van a aprender y hacer uso de la informática en mejores condiciones". Y el secretario general del PSPV, Jorge Alarte, tachó por su parte de "fanático" a Font de Mora "lo que le ha convertido en un hombre ciego y sordo políticamente", afirmó en referencia al rechazo de diversas ayudas del Gobierno "que favorecen la modernización de la enseñanza", dijo.

Sin embargo la secretaria ejecutiva de Política Social del PPCV, Andrea Fabra, contrapuso que quien deja fuera a la Comunidad del plan Escuela 2.0 es el Gobierno "que no ha dejado adaptarlo a la realidad del sistema educativo valenciano e interfiriendo en la incorporación de pizarras digitales", al tiempo que tachó de "gratuitas y poco serias" las críticas al conseller.

Finalmente tanto para Ana Barceló, secretaria general del PSOE en la provincia como para la coordinadora de EU, Marga Sanz, quien perjudica a la escuela pública es Font de Mora como "enemigo público número 1" de la misma y por su "victimismo".