La jornada de elecciones escolares o "fiesta por la escuela democrática" -como la califican desde las Ampa de la provincia- se saldó ayer con una participación que ronda el 15% entre el colectivo de los padres de alumnos con el 70% de los centros escrutados.

Pese a ser el sector mayoritario de las votaciones de los consejos escolares -un 75% del total de potenciales electores, alrededor de 150.000 familias en la provincia- su escasa implicación en los centros no consigue despegar. Los arduos intentos de los padres asociados y federados en los colectivos Gabriel Miró y Enric Valor por intentar mejorar este índice cada dos años no logran mucho éxito hasta el momento.

Tampoco se puede decir que las circunstancias que rodean a estas elecciones acompañen a la hora de animar al voto de los padres. Ayer, la frase más extendida entre quienes se acercaron a los colegios e institutos de sus hijos desde las 8 de la mañana para entregar su correspondiente papeleta era algo así como: "No conozco de nada a los que se presentan como consejeros, pero creo que debemos participar". El sentir de Carmen, compartido por la gran mayoría de los consultados a pie de urna, también sigue un mismo criterio a la hora de decantarse por uno u otro candidato: "Me guío por el curso en el que están los hijos de los que aparecen como candidatos porque se supone que mostrará más interés en el consejo".

El profesorado vuelve a erigirse en el colectivo más votante con un 88% de participación, seguido de los administrativos, 83%, y los alumnos 64% según los datos aportados por la Conselleria de Educación sobre la provincia de Alicante al cierre de esta edición. El sector de padres se lamenta de la ausencia de una campaña informativa fuerte con motivo de estas elecciones pero buena parte de los centros han informado por escrito de la fecha e instrucciones para el voto a través de documentos entregados días atrás a los alumnos: "Aquí no hace falta campaña, nos conocemos todos", apuntaba Reyes Pérez, vicepresidenta de la Ampa del colegio Jesuitas de Alicante. "Desde primeros de noviembre se podía votar por correo o anticipadamente en portería y el que quiere, participa", afirma. En su centro las urnas estuvieron abiertas de 14.00 a 18.30 horas para los padres.

"La participación de los padres la marca en realidad cada centro en su manera de proceder", comenta Enrique antes de votar tanto por él como por su mujer. El Instituto Bahía de Babel de Alicante abrió las urnas para padres y madres de 8 a 14.30 y de 18.00 a 20.30 h., en la biblioteca. Alumnos, profesores y administrativos zanjaron el proceso electoral por la mañana y a las 13.15 ya habían empezado el recuento. "Yo he votado al que se presenta de mi clase, le conozco porque ha sido delegado y votamos para que salga alguien que sabemos quién es", comentaba Nicolás Cristiani, estudiante de cuarto de

Secundaria en este centro. En cinco minutos los alumnos votaron mayoritariamente a excepción de las bajas obligadas por la gripe: "380 de 450 alumnos y en urnas como las de las elecciones generales, para darle rango", señalaba el director, quien votó con el resto de profesores en claustro extraordinario aprovechando el tiempo del primer recreo.