La segunda visita a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), en el caso de que la revisión no se supere a la primera, sigue cobrándose tres años después de acordarse que fuera gratuita. En noviembre de 2006, la comisión de Industria, Comercio y Turismo de las Cortes Valencianas aprobó por unanimidad la eliminación de la tasa por la segunda y sucesivas inspecciones, considerando que con el pago de la primera tarifa ya era suficiente. Sin embargo, la Generalitat todavía no ha ratificado ese acuerdo, con lo cual la medida no ha entrado en vigor.
De esta forma, la Comunidad Valenciana no sólo tiene las tarifas más caras de la ITV para coches de toda España, con 60,61 euros en el caso de los turismos diésel, sino que además se ha convertido en una de las pocas que cobra una tasa añadida si la revisión no se supera en la primera visita. Según el último informe que cada año elabora la asociación de consumidores Facua, esta práctica sólo se realiza en Castilla y León, Ceuta, Murcia, Navarra y Baleares, además de en las provincias de Alicante, Valencia y Castellón.
En el momento de acordarse su gratuidad, el precio de la segunda y sucesivas inspecciones en la Comunidad Valenciana era el 75 por ciento de la tarifa habitual. A principios de 2008, desde la Conselleria de Industria señalaban que la gratuidad se establecería "en breve", pero casi dos años más tarde aún no existe una disposición oficial que permita llevar a cabo la rebaja.
La mayoría de las comunidades autónomas prevén que la segunda visita a la ITV sea gratuita, siempre que se realice dentro de un determinado plazo. Otras, como Extremadura y Melilla, no cobran por la segunda pero sí por la tercera y siguientes inspecciones que deban realizarse. El único lugar donde estas visitas a la ITV siempre son gratuitas es Galicia, mientras que Castilla y León cobran en todos los casos un 70 por ciento de la tarifa.
La ITV siempre lleva añadido el pago de 3,50 euros en tasas de tráfico, con lo cual el precio final de la revisión a un coche diésel en la Comunidad Valenciana supera los 64 euros. Para los turismos con motor de gasolina, el coste es de 46,54 si tienen catalizador, y de 39,85 en caso contrario. Según el informe de Facua, la segunda autonomía con los mayores precios es precisamente otra que cobra por las segundas visitas, Castilla y León. Aquí, la ITV de un turismo diésel vale 55,52 euros, mientras que para una motocicleta cuesta 35,12.
Esto convierte a Castilla y León en la comunidad con la ITV más cara para las motos, un apartado en el cual las tarifas de la Comunidad Valenciana son bastante más bajas. La revisión de estos vehículos sale por 21,01 euros más tasas a la primera. Aún así, es más del doble de lo que cuesta en las estaciones ITV públicas de la comunidad de Murcia.
