- Esta misma semana acaba de anunciar la privatización -vía concesión- de la Línea 2 del tranvía (Alicante-Universidad). Lo sindicatos aseguran que FGV tiene recursos suficientes para gestionar la línea con sus medios y, además, denuncian la progresiva privatización de los servicios. ¿Cuál es su opinión?

En ningún momento acepto que se hable de una privatización porque estamos hablando de planteamientos para unas líneas completamente nuevas, tanto para la Línea 2 del Tram de Alicante como a la 2 de Metrovalencia. Hablamos de líneas que nunca han sido públicas y una cosa que nunca ha sido pública no se puede privatizar. En lo que estamos trabajando es en modelos concesionales para financiar infraestructuras. El coste de la línea de Alicante es superior a los cien millones de euros y no está pagado en su totalidad. Lo que pretendemos con la concesión es que la empresa que se la adjudique termine de pagar y, además, recuperaremos el dinero que hemos invertido. Nos permitirá hacer otras inversiones dentro de las propias líneas de Ferrocarriles de la Generalitat (FGV). En Valencia estamos modernizando la línea 1, la línea 5 y en Alicante lo que se pretende es seguir dando más servicio. El "bucle" de San Juan lo va a explotar FGV y las líneas hasta Altea también. Lo que buscamos son fórmulas de viabilidad para mantener la estructura de la empresa.

- Pero... ¿se privatiza o no se privatiza?

Técnicamente no se puede hablar de privatización porque, insisto, se trata de líneas nuevas que no han sido nunca públicas. Además, el modelo de la concesión lo utilizan todas las Administraciones españolas y en Europa de manera mucho más contundente. En Inglaterra se privatizan líneas que eran públicas y que terminan siendo explotadas por varias empresas. En nuestro caso de lo que se trata es de una cofinanciación con la iniciativa privada. (Ferrovial acaba de vender la empresa con la que gestionaba el aeropuerto de Gatwick).

- Los sindicatos y la oposición le acusan de dar en concesión un negocio rentable.

El que diga que es rentable miente. En estos momentos no hay ninguna línea rentable ni ésta lo será. Hablan también que la Línea 2 generaría 80 puestos de trabajo. Eso es lo importante, da igual que sean públicos o privados. Por otro lado, ahora mismo no hay ninguna línea ferroviaria en la que un mismo explotador construya las vías, compre el material y lo gestione. Es un modelo completamente obsoleto y el primero que lo defiende es el ministro de Fomento que busca iniciativa privada y financiación para sus proyectos. Es ridículo que en Alicante haya gente que se eche las manos a la cabeza por utilizar unos modelos que está utilizando todo el mundo en el resto de España y en la UE.

- Lo que no me negará es que el momento elegido es más que complicado con la que está cayendo con la crisis económica. Tan mal se encuentran las cuentas del Consell para no poder seguir financiando las infraestructuras con los sistemas clásicos. ¿Están las empresas receptivas?

FGV ha ido creciendo de una manera importante en líneas, tiene una estructura de 2.000 personas y unos gastos de mantenimiento cada vez más importantes. La empresa necesita ayudas porque hemos tenido que endeudarnos de manera importante, porque se trata de un servicio público pensamos antes en las personas que en los beneficios. Para mantener FGV no sólo hemos decidido dar líneas en concesión sino también crear empresas mixtas de mantenimiento como, por ejemplo, tiene Renfe con todos los fabricantes de material móvil (Siemens...). Vamos a formar una sociedad mixta en los talleres de El Campello en la que la Generalitat mantendrá el 49% del capital. Daremos la posibilidad de que el trabajador de FGV que quiera incorporarse pueda hacerlo y si no le gusta regresará a la empresa porque le guardaríamos la plaza.

- Pero la pregunta, ¿están las empresas receptivas?

El objetivo es mantener la rentabilidad de FGV y trabajamos en todo tipo de actuaciones para reducir los gastos y una de las iniciativas es contar con la iniciativa privada. Por supuesto que el momento no es el ideal para que las empresas hagan inversiones importantes pero por eso buscamos otros socios como instituciones financieras, fabricantes de material móvil... para encontrar el mejor modelo posible. Los pliegos de condiciones se están ultimando y se van a presentar a los sindicatos. Alicante no va a salir perjudicada. Por ejemplo, en el tema de los autobuses que conectan Alicante con San Vicente. Si los trabajadores tuvieran algún problema laboral por la desaparición de alguna línea tendrían preferencia para integrarse en la Línea 2 del tranvía. Los precios, la seguridad, se estudia todo a fondo.

- También le acusan de jugar con las seguridad de la línea Alicante-San Vicente al darla en concesión.

No lo acepto. Hay algunas plataformas que recogen firmas sin conocer ni siquiera los pliegos y engañando a la gente. Su actuación es casi motivo de demanda.

- Para acabar con el tranvía. ¿Cómo están los proyectos para extender el TRAM al aeropuerto de El Altet y a Elche?. Si no hay estación intermodal para el AVE no hay continuidad para el tranvía y la cosa parece que va para largo.

No está paralizado. Por nuestra parte tenemos todos los proyectos en marcha pero es cierto que no sabemos todavía qué hará la sociedad Avant con la estación intermodal. Nosotros contamos con el estudio hecho de la estación pero nos tienen que decir donde la colocamos. Incluso podríamos realizar ya las obras y dejarlo todo a expensas de tirar una pared y conectar nuestra estación con la futura del AVE. El túnel hasta la estación intermodal está casi acabado y la extensión a Elche se ha dividido en tres fases: tranvía soterrado hasta el barrio de la Florida; en superficie desde la Florida hasta el aeropuerto con el documento ya en la fase de tramitación ambiental y de ahí hasta Elche, cuyo proyecto básico se está redactando.

- ¿Fomento mueve ficha?

En este caso ni Fomento ni Adif deben mover la ficha. El tema es de la sociedad Avant. Ya les hemos trasladado, en las pocas reuniones que hemos tenido, el que necesitamos contar con el proyecto definitivo de la estación intermodal. Siempre nos hemos quejado de que esta sociedad apenas reúne y en el fondo ha habido también muy mala suerte. Desgraciadamente falleció el gerente y también desapareció la constructora que se iba a hacer cargo de la estación intermodal. La nuestra está diseñada acorde al proyecto inicial por lo que ahora habrá que ver cual es su última opción.

- ¿Llegará el AVE a Alicante en 2012?

Tengo más clara la llegada a Valencia en 2010 que a Alicante. Los presupuestos para el año que vienen dejan clara la apuesta del Gobierno por Valencia con 600 millones de euros, pero en la provincia sólo hay consignados 140 millones que, en un principio, parecen escasos. En Valencia espero que el problema legal surgido en Cuenca se solucione pero en Alicante dudo que pueda entrar a tiempo. Espero y confío en que llegue en 2012 y que ya en 2010 tengamos un recorte importante del tiempo de viaje con la entrada en servicio del intercambiador de Albacete. No obstante, en Valencia llevan un año y medio con las obras muy aceleradas e, incluso, yo mismo he tenido ocasión de realizar un viaje de 60 kilómetros con el ministro en un tren-laboratorio que deja el AVE a las puertas de Valencia. Si esas mismas ganas se hubieran tenido desde el año 2003 con Alicante, cuando ya estaban todos los proyectos hechos, pues el tren hubiera llegado antes a la provincia. Ójala llegue en 2012.

- ¿Y el tren de la costa Alicante-Valencia?

Es una necesidad y un planteamiento que le hizo el presidente Francisco Camps al ministro José Blanco en la reunión que mantuvieron en julio. Además hay un acuerdo para que se incluya en el futuro plan ferroviario. Por nuestra parte vamos a terminar la conexión de Gandía a Dénia y después habrá seguir hacia Altea, Benidorm (es un pecado que un municipio con 100.000 habitantes siga sin un ferrocarril en condiciones). En el plan ferroviario quedarán fijadas las cantidades económicas que deba aportar la Generalitat y Fomento. Consideramos que el tren de la costa es un tren de media distancia complementario al AVE regional que hará una función muy buena. La inversión debe ser del Gobierno central y se está negociando. Contamos con el compromiso del propio ministro José Blanco.

- Volviendo a la búsqueda de apoyo empresarial en estos tiempos de zozobra económica. ¿No está escarmentado por el poco apoyo que ha tenido su proyecto para conectar con una autopista de peaje Alicante y Caudete?

No esta parada, todo lo contrario. Hay empresas que se han interesado de España e incluso extranjeras pero nos han pedido más datos. Lo que hemos hecho es avanzar y contratar la redacción del proyecto básico. Se trabaja en eso y estoy convencido de que la autopista va a ser una realidad. Efectivamente no es el mejor momento, pero las empresas son conscientes de que dentro de cuatro o cinco años, cuando esa autopista esté terminada, será rentable. Queremos tener más cerrados los datos para poder darles mayor información.

- La entrevista se realiza en la cafetería Noray del Puerto, diseño del arquitecto García Solera, y una de las actuaciones lanzadas por Mario Flores cuando era presidente del Puerto de Alicante (1996-2007). Su puerto no escapa a la crisis. La ampliación ha terminado pero barcos los que se entiende como mercantes, muy pocos. ¿Cómo lo ve?

En parte soy responsable del proyecto. El Puerto tuvo que hacer una ampliación porque los dos muelles comerciales que tenía, el 14 y el 17, estaban colapsados. La única salida, tal como estaba reflejado en el plan especial del Puerto, era ampliarlo. Conseguimos fondos de cohesión de Bruselas y el apoyo de la iniciativa privada. Lo que ha pasado ahora ese que sufrimos una crisis que afecta a todos los puertos de España donde se están dando unas bajadas de tráfico impresionantes, superiores al 50%. Al frente del Puerto hay una persona competente y concienciada en la necesidad de ganar nuevas líneas y, en este sentido, el otro día me llevé un alegría al ver que en breve se inaugurará una nueva con el norte de África. Los barcos "feeder" de Maerks siguen apostando por el Puerto y también tengo que decir que son los concesionarios los que deben hacer también algo.

- ¿Quién tuvo la culpa del fiasco de la planta de biodiésel?

No tengo ninguna duda de que lo del biodiésel no fue una equivocación del Puerto. Las plantas funcionan en la mayoría de los puertos de interés general del Estado. Es cierto que las condiciones del mercado han cambiado pero en el momento en el que se planteó fue una gran oportunidad. Iban a venir barcos de Argentina cada diez días con aceite y estaba previsto contar con nuevas líneas. El rechazo ciudadano influyó en los inversores y también cambió el mercado porque han salido otras alternativas a los biocombustibles. No obstante insisto en que aquel momento no podíamos dejar de perder la oportunidad. Se hizo con la intención de generar riqueza.

- Le pitan los oídos cada vez que los vecinos de Babel denuncian el tema de los silos, de los varaderos, prácticamente de todas las actuaciones industriales que se han desarrollado en poniente.

Es un tema que he explicado de forma directa a los propios vecinos en alguna ocasión. El Plan Especial del Puerto del año 1992 recogía una ampliación y tuvo su tramitación con exposiciones públicas y todos los procesos legales. Ha habido gente que se ha quejado de la ampliación viviendo enfrente y viendo como avanzaban las obras. Lo he dicho muchas veces. En algunos casos se ha manipulado el tema por los promotores que hacían las casas. Todo el mundo sabía que allí no iba un campo de golf. Una ampliación portuaria lleva consigo depósitos, grúas, contenedores y barcos de gran tamaño. Incluso me han llegado a decir que creían que amarrarían cruceros. La barrera visual hubiera sido más grande. Los silos herméticos de cemento no contaminan nada. Todo se hizo con luz y taquígrafos. En un Puerto todo lo que pone lo permite el plan del Puerto.

- ¿Hasta cuándo en política?. Es de los pocos consellers de Camps a los que todavía no ha salpicado el Caso Gürtel. ¿Cómo lo ve? ¿Les pasará factura electoral?

No creo que nos pase factura. Tenemos mas de un año y medio por delante y se va a aclarar todo. Además, lo digo sinceramente, para mí, de momento, no hay nada. Lo único que hay clara es una campaña de acoso y derribo por parte del Gobierno, determinadas instituciones, jueces y fiscales... una serie de organismos apoyados por algunos medios de comunicación que sacan todos estos temas de manera desproporcionada. Otros casos muy importantes y graves como el contrato de la hija de Chaves pasan desapercibidos. En Fitur, por ejemplo, las contrataciones de Turismo con una empresa estaban bien hechas por 700.000 euros. Por el mismo espacio la Junta de Andalucía se gastaba tres millones y medio y no pasaba nada. Se filtran cosas que están bajo secreto de sumario, quién sabe si las conversaciones publicadas no están manipuladas.

- Algunas conversaciones tienen tela marinera.

Para mí, lo peor es que se están publicando páginas y páginas de esto y la gravísima crisis económica del pais no recibe las mismas páginas. El tema se ha desproporcionado. Se está yendo a por un partido político y las personas que lo dirigen. Lo único que puede decir es que yo llevo dos años en el Consell y a mí jamás me ha dicho nadie a quien tengo que darle una obra y hablamos de una conselleria inversora. Nadie me ha dicho nunca dale esto a éste porque le debemos un favor.

- Y ser alcalde de Alicante, ¿le apetece? o Sonia Castedo ha ganado la carrera a todos los aspirantes. La avenida de Dénia ha sido un puntazo.

Ja, ja, ja... Sonia Castedo lo está haciendo muy bien. Se está consolidando como una buena alcaldesa, una buena gestora y de lo único de lo que me voy a preocupar es de que a primeros del mes que viene podamos seguir con las obras para acabarla. Quiero hacer mi trabajo y finalizar lo antes posible las obras que tengo proyectadas. No tengo ninguna inquietud por la Alcaldía. Estoy disfrutando de una experiencia muy gratificante, pero estoy a disposición del presidente. Él me llamo para estar aquí y el día que me proponga otra cosa la estudiaré. La alcaldesa lo está haciendo bien.