Lo que la UA no tiene necesidad de mejorar porque ya está calificado como de "envidiable" por parte de la valoración de la comisión técnica ministerial es el diseño de su Campus y su distribución provincial a través de las sedes. El veredicto acentúa la existencia de "un único campus, de una belleza urbanística y arquitectura envidiables", como señala textualmente.

Su alabado diseño y arquitectura se deben tanto al ex rector Martín Mateo que lo inició en su mandato como al también ex rector Andrés Pedreño -quien a su vez formó parte del equipo de su predecesor?- que lo culminó, aunque su mayor sueño o utopía, como lo llamó en su momento, fuera el parque científico que no pudo poner en marcha por el férreo impedimento que sufrió por parte del Consell liderado entonces por Eduardo Zaplana y con el actual presidente Camps como conseller de Educación.

Esta absoluta ausencia de empuje al parque científico motivó incluso la decisión de Pedreño de dimitir del Rectorado, dando paso a Salvador Ordóñez primero y al actual rector Jiménez Raneda después, con quienes finalmente, y gracias al respaldo que obtuvieron del conseller recientemente fallecido, García Antón, el complejo científico empieza a dar sus primeros pasos.