L a alcaldesa de Alicante puede ya respirar tranquila porque su deseo de incluir naranjos en la remodelación de la plaza del Ayuntamiento saldrá adelante, pese a la existencia de una resolución de la Conselleria de Cultura que los cuestionaba por ser "ajenos a la tipología" del lugar. El inspector jefe de Patrimonio, Santiago Varela, comunicó ayer a Sonia Castedo que los reparos al arbolado son sólo "una sugerencia" y, por tanto, no tienen carácter imperativo.

La reforma de la plaza del Ayuntamiento era uno de los proyectos prioritarios de Castedo desde que asumió la Alcaldía, que incluso aportó ideas a su diseño, entre las que destacaba la presencia de una docena de naranjos alineados en los flancos laterales de la plaza.

El proyecto debía contar con la aprobación de Cultura por tratarse del entorno de protección del Ayuntamiento, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), y su respuesta fue favorable con la excepción del arbolado, sobre el que señalaba la resolución suscrita por la directora general de Patrimonio que "deberá evitarse la colocación de elementos arbóreos al ser ajenos a la tipología de la plaza".

Ayer, con motivo de una visita a las obras de restauración del castillo, la alcaldesa coincidió con Santiago Varela, arquitecto e inspector jefe de la Conselleria de Cultura en Alicante. Lo primero que hizo Castedo, a modo de saludo, fue preguntarle al mismo si "me vas a dejar" plantar el arbolado. Como la respuesta no pareció clara, al final de la visita este periódico preguntó a Varela sobre el tema y su respuesta fue que el diseño de la plaza del Ayuntamiento está aprobado y lo referido al arbolado es sólo una sugerencia y no una imposición.

Por tanto, ya se puede confirmar que habrá naranjos en la plaza del Ayuntamiento. Además, y salvo cambios de última hora, se plantarán en alcorques, como aparece en el proyecto, y no en maceteros, que era una alternativa a estudiar. Estas obras, como ya se anunció, deberán concluir antes de fin de año.