La promesa de la Generalitat data del curso 2002-03 pero ha sido esta misma semana -siete cursos después- cuando las reformas de la Escuela Infantil Rayuela de Alicante han empezado a ser una realidad. Los padres no veían llegar el momento en el que juegos de piedra, elevados bordillos de cemento o peligrosos radiadores sin cubierta fueran erradicados del centro por la seguridad de sus hijos, entre 9 meses y 3 años de edad. Los macizos leones y elefantes del patio infantil son los primeros elementos que han pasado a la historia y en los próximos meses está previsto que culmine una reforma que se adjudicó el pasado mes de agosto por 160.000 euros.

Las obras han tardado cinco meses en arrancar después de que Mayve Construcción obtuviera el contrato pero los padres están conformes con las medidas de seguridad de la obra. Lo único que no figura en el esperado proyecto es el techado para resguardar a los pequeños del sol y la lluvia. El resto de medidas se contemplan: material que amortigüe las caídas en el patio central, vallas y adecuación del patio exterior, nivelación del terreno de juegos, retirada de los alcorques y palmeras del patio infantil así como el resto de elementos peligrosos e incluso el saneado de los accesos a la cocina por el callejón exterior, que se adecuará como patio externo.

La alarma sobre el peligro del centro para los niños saltó tras el accidente en 2007 de uno de los pequeños que cayó de cabeza al firme. Posteriores denuncias ante el elevado índice de partes de accidente desembocó en una manifestación y concentración ante Educación. Un año después de movilizarse de esta forma, empiezan a ver resultados.